El conflicto bélico entre Ucrania y Rusia ha visto un nuevo capítulo con el desarrollo de tecnologías armamentísticas innovadoras por ambas partes.
Si bien Moscú ostenta una clara ventaja en recursos y equipamiento, Kiev ha demostrado una capacidad resiliente para desarrollar soluciones creativas ante las amenazas rusas.
En este contexto, Ucrania ha dado a conocer Trizub, un sistema de armas láser de defensa aérea que promete revolucionar la lucha contra los drones y misiles rusos.
La revelación del coronel Vadym Sukharevskyi, comandante de las Fuerzas de Sistemas No Tripulados dentro del ejército ucraniano, durante una cumbre de defensa celebrada en Kiev ha generado gran interés internacional.
Funciona de verdad; existe de verdad.Podemos afirmar que hoy Ucrania es, si no me equivoco, el quinto país que puede decir que tiene un arma láser, declaró Sukharevskyi con orgullo.
Si bien se desconoce la mecánica exacta detrás del desarrollo de Trizub, algunos expertos especulan sobre una posible inspiración en el DragonFire, un sistema de armas láser británico diseñado para derribar drones, misiles, aviones e incluso satélites, y que podría estar operativo en 2027.
El gran interés de los láseres es que permiten derribar armas baratas como los drones sin utilizar armas mucho más costosas, explica Martin J. Dougherty, experto en armamento y autor de Aircraft, Tanks and Artillery of the Ukraine War.
El especialista destaca la potencialidad de Trizub como una alternativa de bajo coste a los misiles tradicionales para contrarrestar las amenazas aéreas rusas.
La eficacia del sistema ucraniano contra objetivos que se mueven a velocidades superiores o poseen mayor resistencia al calor, como proyectiles de artillería y misiles balísticos, aún está por determinar.
Patrick Senft, de Armament Research Services, una consultora especializada en investigación de armas y municiones, compara Trizub con el LaWS de la Marina estadounidense, un sistema láser efectivo contra drones lentos y de bajo vuelo, pero reconoce que su eficacia contra objetivos más complejos requiere tecnología aún más avanzada.
La incorporación de Trizub a las defensas ucranianas representa una nueva etapa en la guerra, marcando un hito en el desarrollo tecnológico militar y ofreciendo un rayo de esperanza para Kiev ante la persistente amenaza rusa.