La Municipalidad impulsa un ambicioso plan de recuperación de paradores de colectivo con el objetivo de mejorar la seguridad y comodidad de los usuarios que recorren los distintos corredores urbanos.

Esta iniciativa busca atender las necesidades de una creciente población que utiliza el transporte público para acceder a oportunidades laborales, educativas y administrativas.

Hasta la fecha, se han reparado 325 paradores, mientras que otros 68 se encuentran en proceso de restauración.

Se han reubicado 20 estructuras a puntos estratégicos con mayor demanda y se están acondicionando 66 refugios existentes para garantizar su funcionalidad.

En paralelo, se avanza en la instalación de 45 nuevos paradores para ampliar la cobertura del servicio.

Este proyecto refleja el compromiso de la ciudad con la mejora de la calidad de vida de sus habitantes, declaró un vocero de la Subsecretaría de Integración Socio Urbana.

Buscamos brindar espacios seguros y confortables donde los vecinos puedan esperar su transporte público con tranquilidad.

Las obras se realizan mediante personal proveniente de cooperativas y empresas sociales, promoviendo así el desarrollo económico inclusivo.

Los trabajos abarcan diversas acciones como la renovación del contrapiso para garantizar la accesibilidad universal, la colocación de bancos y, en algunos casos, el desplazamiento de las estructuras para facilitar el acceso a viviendas.

Este proyecto se inscribe en un contexto donde la movilidad urbana se ha convertido en una prioridad fundamental.

La creciente densidad poblacional y el incremento en el uso del transporte público demandan una infraestructura adecuada que responda a las necesidades actuales.