El padre de Cassandre Bouvier amenaza con denunciar penalmente a Urtubey y 30 individuos por encubrir el doble femicidio en Salta.

La decisión del Tribunal de Impugnación de Salta que sobreseyó a Santos Clemente Vera por la muerte de Cassandre Bouvier y Houria Moumni, tras más de una década de prisión sin pruebas, ha generado una ola de indignación y ha reavivado las graves acusaciones contra el ex gobernador Juan Manuel Urtubey.

Jean-Michel Bouvier, padre de la víctima francesa, anunció desde París su intención de denunciar penalmente a Urtubey y a 30 individuos más, quienes él considera responsables del desastre político y judicial que ha enturbiado la búsqueda de justicia por el doble crimen.

Bouvier acusa a los imputados de torturas policiales, falsas inculpaciones, manipulación de pruebas y encubrimiento.

Se busca cerrar la causa con una amnistía general que dejaría impunes a presuntos implicados, denunció Bouvier en un audio difundido por el diario El Tribuno.

El padre de Cassandre criticó duramente la investigación, señalando que los peritos oficiales solo analizaron parte de las muestras tomadas en las autopsias y que los hisopados desaparecieron durante la causa.

Muchos hombres se han deshonrado sin resolver lo que sigue siendo un doble femicidio, un ataque a la integridad del cuerpo de mujeres, afirmó Bouvier, quien también exigió la expulsión del juez Martín Pérez, quien dirigió la instrucción del caso, y otros magistrados que él considera responsables de este naufrágio judicial.

Bouvier acusa al gobernador Gustavo Sáenz de haber permitido la continuidad de los errores, sin tomar medidas para garantizar una investigación imparcial.

Siento que me cerraron las puertas en la cara, lamentó Bouvier tras su última reunión con el gobernador y otros altos funcionarios judiciales.

A pesar del dolor y la frustración, Bouvier aseguró que no se rendirá: Voy a continuar luchando, incluso aunque deba arriesgar mi vida para seguir.

Este caso sigue siendo un hito en la lucha por la justicia para las víctimas de violencia de género y pone en evidencia los desafíos que enfrenta el sistema judicial argentino en su camino hacia una verdadera imparcialidad e independencia.