La oposición venezolana ha denunciado la detención del excandidato presidencial Enrique Márquez, un acto que se suma a una creciente ola de represalias contra líderes opositores y activistas de derechos humanos.
Voluntad Popular (VP), partido político antichavista, calificó el arresto como un secuestro y responsabilizó directamente al régimen de Nicolás Maduro por este hecho y las recientes detenciones de seis políticos opositores, así como la desaparición del activista Carlos Correa y el secuestro de Rafael Tudares, yerno del líder opositor Edmundo González Urrutia.
Márquez, al igual que la mayoría de los venezolanos, no avaló el fraude de Maduro el pasado 28 de julio.
No ha cometido ningún delito.Exigimos que aparezca ya y sea liberado inmediatamente, declaró VP a través de sus redes sociales.
Enrique Márquez, quien se desempeñó como exvicepresidente del Consejo Nacional Electoral (CNE) y exdiputado, se ha mantenido activo en la crítica al gobierno de Maduro, demandando la publicación de las actas de votación del pasado 28 de julio y rechazando la convalidación de la reelección de Maduro por parte del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
En diciembre del año pasado, Márquez afirmó que la voluntad de cambio político de los venezolanos está intacta, a pesar de la actuación cuestionable del CNE y el TSJ. Manifestó su compromiso de persistir en la búsqueda del cambio para evitar que la Constitución se convierta en un documento inoperante.
La Plataforma Unitaria Democrática (PUD), agrupación de oposición mayoritaria, denuncia fraude electoral y reivindica la victoria de su candidato, Edmundo González Urrutia, basándose en el 85,18% de las actas que obtuvieron gracias a la labor de testigos y miembros de mesa presentes en los centros electorales.
La detención de Márquez se suma al creciente clima de temor e incertidumbre en Venezuela, donde la libertad de expresión y la participación política se ven cada vez más restringidas.