La diverticulosis, una condición que afecta a millones de personas en el mundo, se ha convertido en un problema de salud pública creciente, especialmente en poblaciones occidentales.

Se caracteriza por la formación de pequeños sacos o divertículos en la pared del colon, que pueden causar molestias y complicaciones graves si no se tratan adecuadamente.

Según datos proporcionados por la Federación Española del Aparato Digestivo (FEAD), hasta el 40% de la población mayor de 50 años presenta diverticulosis.

La prevalencia aumenta con la edad, alcanzando el 70% en personas mayores de 80 años.Esta condición se asocia principalmente a una dieta baja en fibra y rica en carbohidratos refinados, así como al sedentarismo y la obesidad.

Es fundamental comprender que la diverticulosis es una enfermedad prevenible, afirma el Dr. Juan Pérez, gastroenterólogo experto en patologías digestivas.

Una dieta equilibrada con abundante fibra, ejercicio regular y un peso saludable son los pilares fundamentales para prevenir su desarrollo.

La mayoría de las personas con divertículos no presentan síntomas, pero alrededor del 20% experimenta molestias abdominales, distensión gástrica, gases o cambios en el ritmo intestinal.

En algunos casos, la diverticulosis puede dar lugar a complicaciones como la diverticulitis (inflamación de los divertículos), perforación o sangrado.

El tratamiento para la diverticulosis sin síntomas se enfoca en la prevención. Se recomienda una dieta rica en fibra, con un consumo de 30-35 gramos diarios, y una mayor actividad física.

Si bien no existe un tratamiento específico para la enfermedad diverticular asintomática, el Dr. Pérez recalca la importancia de adoptar hábitos saludables que contribuyan a prevenir complicaciones.

Para aquellos con síntomas, se siguen las mismas recomendaciones dietéticas y de estilo de vida, además de evitar alimentos grasosos y carnes rojas en exceso.

Analgesicos o espasmolíticos pueden aliviar los dolores cólicos, y en casos más graves, medicamentos como la rifaximina podrían ser necesarios.

La diverticulitis complicada, que representa el 25% de los casos, a menudo requiere tratamiento quirúrgico para abordar complicaciones como abscesos, fístulas, obstrucciones intestinales o peritonitis.

La diverticulosis es una condición prevalente con un impacto significativo en la calidad de vida de las personas afectadas.

El conocimiento sobre esta enfermedad y la adopción de medidas preventivas son esenciales para reducir su incidencia y minimizar sus posibles consecuencias.