Un sismo con una magnitud de 3.1 en la escala de Richter sacudió durante la madrugada las localidades del noroeste argentino, despertando a numerosos habitantes de Salta.
El epicentro se situó a 79 kilómetros al oeste de San Antonio de los Cobres, a 45 kilómetros al sur de Catúa y a 45 kilómetros al noreste de Tolar Grande, con una profundidad de 185 kilómetros.
Si bien el temblor fue leve, su percepción se hizo sentir en diversos puntos de la región, generando inquietud entre los residentes, especialmente aquellos cercanos al epicentro ubicado en las coordenadas 24.257 de latitud y 67.124 de longitud.
Afortunadamente, hasta el momento no se han reportado daños materiales ni víctimas directas a consecuencia del sismo.
No obstante, el evento ha servido como un recordatorio palpable de la constante actividad sísmica presente en la zona andina del noroeste argentino.
Estos eventos sísmicos, aunque aparentemente leves, nos recuerdan la importancia de estar preparados ante posibles fenómenos más intensos, declaró un experto en geología del Instituto Nacional de Prevención Sísmica (INPRES).
Las autoridades locales continúan monitoreando la situación, manteniendo una estrecha comunicación con los cuerpos de emergencia y recomendando a la población mantener la calma y estar atentos a eventuales réplicas.