En un momento de fragmentación interna y tensiones políticas, el gobernador bonaerense Axel Kicillof se reunió con la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner y el exministro de Economía Sergio Massa en una muestra de unidad que busca recomponer las filas del peronismo.

El encuentro, realizado en la reserva municipal Los Robles en Moreno, fue convocado por Máximo Kirchner, hijo de la expresidenta, quien dirige el Consejo Justicialista Bonaerense.

Aunque Kicillof aclaró que su participación sería breve debido a compromisos con los preparativos para el quinto aniversario del gobierno provincial, su presencia simboliza un acercamiento significativo tras semanas de distanciamiento entre él y la exmandataria.

Voy a hacer una pasada para estar ahí, para participar porque fui invitado, señaló el gobernador durante su habitual conferencia de prensa.

Las fotos del encuentro muestran una aparente complicidad entre Massa, Máximo Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner, mientras que Kicillof se muestra en un segundo plano.

La última palabra la tendrá la expresidenta, finalizando un evento crucial para el futuro político del peronismo.

La reunión tuvo lugar en un contexto marcado por la disputa sobre Aerolíneas Argentinas.El gobernador bonaerense anticipó una posible intervención provincial si el gobierno nacional de Javier Milei decide vender o entregar la aerolínea a sus trabajadores.

Si hay una intención de transferir, nosotros empezamos el camino de diálogo con los trabajadores y con gobernadores que la necesitan tanto, expresó Kicillof, recalcando la importancia estratégica de Aerolíneas para la provincia: la comparación de con o sin AA, a la Provincia le cuesta US$2665 millones.

Genera 81 mil empleos directos e indirectos.
La patria no se vende, sentenció el gobernador, dejando en claro su postura frente a una posible venta de la aerolínea estatal.

La incertidumbre sobre el futuro de Aerolíneas Argentinas genera preocupación dentro del peronismo, que busca evitar un nuevo escenario de crisis similar al ocurrido en el pasado.

El encuentro entre Kicillof, Massa y Cristina marca un intento por reconstruir las bases del partido Justicialista, pero su éxito dependerá de la capacidad de los líderes peronistas para superar sus diferencias y enfrentar los desafíos políticos que se avecinan.