Un clima de incertidumbre y preocupación envuelve al complejo espacial argentino tras la denuncia de trabajadores de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) y VENG S.A, quienes alertaron sobre una grave crisis que pone en peligro el funcionamiento de dos satélites cruciales para la prevención de desastres naturales: SAOCOM 1A y 1B.

Desde las organizaciones gremiales se señala que la paralización de actividades científicas derivada de un complejo panorama laboral, marcado por atrasos salariales y una reducción drástica de personal, podría significar la pérdida de una inversión estratégica para el país.

La situación actual implica un riesgo real para la continuidad del programa SAOCOM, expresó un portavoz de ATE, agrupación que nuclea a los trabajadores.

El futuro de los satélites SAOCOM 1A y 1B, diseñados para generar información vital en situaciones de emergencias naturales o antrópicas, se encuentra en el aire.

Si VENG deja de funcionar, CONAE no podrá seguir operando estos satélites, advirtió un especialista del sector espacial, quien añadió que también se verían afectados otros proyectos satelitales en desarrollo.

Las denuncias apuntan a un deterioro profundo en la situación financiera de VENG S.A, principal accionista de la cual es CONAE. Según las fuentes, el pago de sueldos se realiza a última hora, y se han registrado retrasos en el pago de aguinaldos por falta de fondos.

La empresa, que depende en gran medida del financiamiento proporcionado por CONAE para sus servicios, enfrenta una crisis financiera acuciante que amenaza con desmantelar años de trabajo y esfuerzo.

El gobierno está vaciando al sector científico, denunciaron desde las organizaciones gremiales.El presupuesto 2025, según fuentes consultadas por este medio, se prevé que sufra una reducción significativa, lo que agravaría aún más la situación precaria en la que se encuentra el complejo espacial argentino.

La caída del presupuesto y la falta de inversión en ciencia y tecnología son señales alarmantes para el futuro del sector, no solo en el ámbito espacial, sino también en áreas estratégicas como la investigación científica y la innovación tecnológica.