La localidad fronteriza de Aguas Blancas, provincia de Salta, se encuentra abarrotada por la llegada masiva de argentinos provenientes principalmente de Jujuy y Salta.
Numerosos ciudadanos aprovecharon el feriado nacional para realizar compras en territorio boliviano, impulsados por la favorable situación cambiaria que favorece al peso argentino.
La afluencia de personas se ha visto exacerbada por el cierre preventivo del Puerto Chalanas debido a las intensas lluvias que azotan la región.
Esta contingencia ha provocado una congestión inédita en el cruce fronterizo, con largas filas de vehículos extendiéndose por más de cinco kilómetros.
Está que explota de gente Aguas Blancas, relata Miguel, un turista jujeño originario de Ledesma quien llegó a la frontera para realizar compras atraído por las ventajas cambiarias.
Hace dos horas que estamos esperando para pasar.
El colapso en el cruce fronterizo ha generado molestias y frustraciones entre los viajeros, quienes se enfrentan a largas esperas bajo condiciones climáticas adversas.
La situación pone de manifiesto la falta de infraestructura y recursos para atender el flujo migratorio durante eventos festivos.
Es lamentable que la falta de planificación ante un evento previsible como un feriado nacional nos lleve a esta situación, comentó un especialista en migración, quien pidió anonimato.
Se requiere una mayor inversión en infraestructura y personal para garantizar un tránsito fluido y seguro.