Una tragedia ha azotado a Cuba tras una serie de violentas explosiones ocurridas en un depósito de armas y municiones en la localidad de Rafael Freyre Holguín, provincia de Holguín.
El incidente, ocurrido durante la madrugada, dejó un saldo de 13 militares desaparecidos y generó preocupación entre la población local.
El Ministerio de las Fuerzas Armadas (Minfar) confirmó la cifra de desaparecidos, indicando que se trata de nueve soldados, dos suboficiales segundos y dos mayores.
Las autoridades cubanas mantienen activas las labores de búsqueda y rescate en el área afectada, mientras que equipos especializados investigan las causas del siniestro.
El impacto emocional del suceso es palpable en la comunidad de Melones, donde se ubica el almacén militar.
Se reportaron 361 personas evacuadas de zonas cercanas al lugar de los estallidos como medida preventiva.
Adicionalmente, 1.245 pobladores de La Púa, un pueblo a unos 30 kilómetros de distancia, fueron trasladados a zonas seguras.
Las autoridades estamos trabajando con máxima prioridad para determinar las causas del incendio y aclarar todas las circunstancias que rodearon este trágico evento, declaró un portavoz del Minfar en un comunicado oficial.
La atención médica y el apoyo psicológico están disponibles para los familiares de los militares desaparecidos.
Expertos analizan la magnitud del incidente, destacando la importancia de establecer claramente las causas de la explosión para evitar sucesos similares en el futuro.
Este tipo de accidentes pone de manifiesto la necesidad de implementar protocolos estrictos de seguridad en almacenes de material bélico, señaló un especialista en seguridad industrial.
La tragedia en Cuba ha conmocionado al país y a la comunidad internacional, generando una ola de solidaridad hacia las familias afectadas.
El gobierno cubano se encuentra bajo presión para brindar explicaciones claras sobre el incidente y garantizar la seguridad de sus ciudadanos.