El estado de Nuevo México se ha convertido en un punto focal estratégico en el panorama electoral estadounidense, especialmente en la carrera presidencial de 2024.
A pesar de su tradición demócrata, que data desde 1912, el estado no está completamente garantizado para Kamala Harris, la candidata demócrata.
Nuevo México es un estado complicado para los republicanos, afirma un analista político local.En los últimos años, su apoyo a la derecha ha sido débil.
De hecho, la última vez que un republicano logró la victoria en Nuevo México fue en 2004 con George W. Bush, derrotando al demócrata John Kerry.
La relevancia de Nuevo México en las elecciones presidenciales reside en su histórica correlación con el resultado nacional.
En los últimos 20 años, solo una excepción: 2016, cuando Hillary Clinton ganó en Nuevo México, a pesar de perder la elección general ante Donald Trump.
La precisión del estado como predictor de la victoria final alcanza un notable 80%.
En las elecciones de 2020, Joe Biden se impuso con claridad en Nuevo México, obteniendo el 54,3% del voto popular, mientras que Trump solo logró el 43,5%.
El mapa político a nivel de condados reflejó una división más equilibrada, con 14 condados apoyando a los demócratas y 19 a los republicanos.
A pesar de estar contiguo al estado profundamente republicano de Texas, Nuevo México mantiene una identidad política propia.
La historia del estado, su diversidad cultural y su fuerte presencia nativa americana han contribuido a forjar un panorama político único.
Nuevo México fue parte del imperio español como Nueva España hasta la independencia de México en el siglo XIX. Posteriormente, durante la guerra entre México y Estados Unidos, el territorio se integró a los Estados Unidos.
La ciudad más poblada de Nuevo México es Albuquerque, mientras que Santa Fe es la capital del estado.
Con California, Arizona y Texas, forma parte de la frontera con México.Es el quinto estado más grande de Estados Unidos, pero uno de los menos densamente poblados.
Nuevo México también alberga un lugar importante en la historia estadounidense: Los Álamos, donde se desarrolló la bomba atómica durante la Segunda Guerra Mundial.
La detonación experimental tuvo lugar en White Sands, marcando un hito histórico y desafiante para el mundo.
A pesar de su importancia histórica y geográfica, Nuevo México solo tiene cinco votos electorales, lo que lo convierte en un estado relativamente pequeño en términos de influencia electoral a nivel nacional.
Su historia como predictor del resultado final de las elecciones presidenciales le otorga una relevancia especial en la lucha por la Casa Blanca.