Un nuevo estudio realizado por el Laboratorio de Calidad de Aguas de la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de Salta ha detectado una preocupante cantidad de cianobacterias potencialmente tóxicas en el agua que sale de la Planta Potabilizadora Itiyuro.
La Dra.Liliana Moraña, responsable del laboratorio, señala que los análisis revelaron más de 80 mil células de cianobacterias por mililitro, un nivel que claramente no cumple con los estándares de potabilidad.
No puede un agua que sale de una planta potabilizadora con esta cantidad de células ser apta para beber, afirma la experta.
Moraña destaca que la presencia de estas toxinas en el agua potable es especialmente alarmante debido a sus potenciales efectos en la salud humana, incluyendo problemas gastrointestinales, hepáticos y neurológicos.
La doctora atribuye este aumento en las concentraciones de cianobacterias al abastecimiento del Itiyuro con agua proveniente del Dique El Limón, conocido por tener floraciones de algas tóxicas.
Estos estudios me dicen que, como no hubo lluvia, están introduciendo agua de El Limón, que tiene floraciones de cianobacterias tóxicas, explica Moraña.
Agrega que la Planta Potabilizadora Itiyuro no es eficiente en la remoción de cianobacterias, y no puede sacarlas para que lleguen a la red sin estas células.
El Ente Regulador de los Servicios Públicos ha emitido órdenes regulatorias en el pasado, prohibiendo a Aguas del Norte captar agua de El Limón para abastecer la ciudad.
Según Moraña, la empresa no habría acatado las órdenes y tampoco habría informado a la población sobre la calidad del agua.
Con los resultados de estos estudios se demuestra que la empresa prestataria no cumplió con la orden regulatoria ni informó a la población que el agua no es apta para consumo humano, sino únicamente para tareas sanitarias, afirma Moraña.
Aguas del Norte sostiene tener resultados diferentes en sus análisis.La Dra.Florencia Álvarez Dalinger, miembro del Laboratorio Universitario, enfatiza la imparcialidad y objetividad del trabajo de su equipo y propone una intercalibración con el laboratorio de Aguas del Norte para resolver las discrepancias.
Este nuevo episodio pone en evidencia las debilidades del sistema de suministro de agua potable de Salta y genera preocupación por el posible impacto en la salud pública.
La situación exige acciones contundentes por parte de las autoridades para garantizar un acceso seguro y confiable al agua, recurso vital para la vida.