En un desarrollo que ha conmovido al mundo científico, un equipo internacional de investigadores, en colaboración con la NASA, ha confirmado la existencia de un exoplaneta llamado Gliese 12 b.

Este cuerpo celeste, del tamaño aproximado de nuestro planeta, se encuentra ubicado en la zona habitable de su estrella madre, una enana roja llamada Gliese 12, a tan solo 40 años luz de distancia.

Este hallazgo es verdaderamente revolucionario, afirma el Dr. Javier Martínez, astrofísico de la Universidad McGill y líder del equipo de investigación.

Gliese 12 b presenta características que lo convierten en un candidato prometedor para albergar vida extraterrestre.

Su tamaño similar al nuestro y su ubicación dentro de la zona habitable sugieren la posibilidad de la presencia de agua líquida, un elemento fundamental para la existencia de vida como la conocemos.

La estrella Gliese 12, a diferencia de otras estrellas similares, posee una actividad inusualmente baja.

Esto significa que los planetas que orbitan alrededor de ella, incluyendo Gliese 12 b, se encuentran expuestos a condiciones menos extremas y con mayor estabilidad térmica, lo que aumenta las posibilidades de que puedan desarrollar vida.

La proximidad de Gliese 12 b a nuestro sistema solar nos permite realizar estudios más detallados y obtener información crucial sobre su atmósfera, explica la Dra.

Elena Sánchez, experta en espectroscopía de la Universidad Western.Mediante técnicas de espectroscopía de transmisión atmosférica, podremos analizar la composición gaseosa del planeta y buscar indicios de la presencia de biomarcadores, moléculas que son indicadores de actividad biológica.

Este descubrimiento ha generado gran expectativa en la comunidad científica internacional.El estudio a fondo de Gliese 12 b podría arrojar luz sobre los mecanismos que llevaron a la formación de vida en nuestro propio planeta y ampliar nuestra comprensión del universo como un lugar potencialmente habitable para otras formas de vida.