El Instituto de Salta, en colaboración con la organización TECHO Argentina, llevó a cabo una iniciativa emblemática para brindar viviendas dignas a familias de escasos recursos.
En el marco de esta acción conjunta, se construyeron casas prefabricadas de emergencia, representando un paso significativo hacia la mejora de las condiciones habitacionales y la promoción de la inclusión social.
Ricardo Jiménez, destacado por su rol clave en la alianza estratégica con TECHO, enfatizó que este proyecto no solo proporciona un refugio seguro sino que también busca romper el ciclo de precariedad a través de la educación.
Finalizar la escolaridad es un primer paso para acceder a un sinfín de oportunidades y lograr un crecimiento que marque la diferencia, expresó Jiménez a las familias beneficiarias.
Mario Baccaro, colaborador del grupo Swiss Medical, compartió su motivación por participar en esta iniciativa: Dar refugio seguro a quien lo necesita es un logro.
Una de las cuestiones sociales que más me impacta es la pobreza y poder ayudar en este inicio para que una familia pueda mejorar su condición económica social me hace sentir que sí es posible un mundo mejor para los más vulnerables.
El proyecto contó con el apoyo entusiasta de diversas unidades de negocio del grupo Swiss Medical, jóvenes voluntarios de TECHO y otras instituciones aliadas, quienes trabajaron en conjunto para lograr este objetivo humanitario.
La construcción se vio impulsada por la utilización de materiales innovadores, como bases de cemento que agilizan el proceso y facilitan la construcción en terrenos difíciles.
Este proyecto no solo ofrece una solución inmediata a la falta de vivienda digna sino que también representa un compromiso profundo con la equidad, el desarrollo sostenible y la mejora de la calidad de vida en las comunidades más necesitadas.
La empresa se destaca por su constante labor para crear un impacto positivo en la sociedad, contribuyendo a un futuro más justo y próspero.