Organizado por la familia Baez, este encuentro busca mantener viva la tradición ancestral de honrar a la Madre Tierra, una práctica arraigada en las comunidades del norte argentino.

Decenas de niños provenientes de diferentes academias de danza provinciales se congregaron para rendir homenaje a la Pachamama con música, baile y plegarias.

El evento comenzó con una chocolatada que sirvió como preludio al inicio del ritual.A partir de las 10:00 horas, los pequeños coreógrafos desfilaron ante el anfiteatro para realizar un tradicional convite, ofreciendo a la Pachamama sus mejores danzas.

El ritmo contagioso del bailecito, carnavalito y zamba alegre inundó el parque, impregnando el ambiente de alegría y fervor cultural.

La celebración también incluyó la interpretación de coplas, evocando aún más el espíritu ancestral de la tradición.

En mi casa lo hacen porque mi abuela empezó con esa tradición y después lo siguió haciendo mi mamá, compartió Lía, una niña que aprendió sobre el culto a la Pachamama desde temprana edad.

Sus palabras reflejan cómo esta práctica se transmite oralmente a través de las familias, consolidándose como un legado cultural fundamental.

El encuentro permitió a los niños expresar su agradecimiento a la Pachamama por sus dones y realizar peticiones para el bienestar de sus seres queridos y la comunidad en general.

Le pido un buen año, salud y que no pase nada malo, expresó Lía mientras Alejandra añadió: Le agradezco por la salud y el trabajo de mis papás, que mi mamá siempre esté conmigo, que le dé salud, dinero y que nunca nos falte el pan.

El Pachamama de los Niños no solo es un homenaje a la tradición ancestral sino también una oportunidad para sensibilizar a las nuevas generaciones sobre el cuidado del medio ambiente.

Es como una costumbre hacia la Madre Tierra y tenemos que hacerle honor y no tirarle tanta basura para poderla proteger, explicó Alexis, uno de los niños participantes.

Este tipo de eventos contribuyen a fortalecer los lazos familiares y comunitarios, manteniendo viva la cultura ancestral del norte argentino y fomentando el respeto por la naturaleza.