En un hecho que ha conmocionado a la provincia de Salta, un grupo de delincuentes vestidos con uniformes militares robó 20 millones de pesos de una empresa local.

Los asaltantes, haciéndose pasar por gendarmes, interceptaron al tesorero de la empresa mientras se dirigía hacia su destino en la Ruta Nacional 51.

Fue un momento de terror absoluto, declaró el empleado afectado.Me sentí totalmente indefenso cuando me dijeron que debía acompañarlos a Gendarmería.

Al intentar conducir mi propio auto, me obligaron a sentarme en la parte trasera y luego se llevaron todo.

De acuerdo con las autoridades, los falsos gendarmes instalaron un control de tránsito ficticio cerca del kilómetro 6.5 de la ruta, utilizando conos para detener el tráfico y revisar un camión que precedía al vehículo del tesorero.

Tras esta acción engañosa, los delincuentes interceptaron al empleado y le solicitaron documentos, interrogándolo sobre su destino y razón de viaje.

Tras una revisión superficial de su vehículo, le ordenaron estacionarse a un costado de la ruta.Cuando el trabajador se bajó del auto, uno de los individuos lo obligó a acompañarlo bajo amenaza con una pistola negra.

Durante el trayecto, el empleado fue trasladado por caminos rurales hasta llegar a San Lorenzo, donde fue amarrado y despojado de sus pertenencias.

Este tipo de delitos son especialmente preocupantes debido a la vulnerabilidad que generan en las víctimas, comentó un experto en seguridad pública.

La utilización de uniformes militares busca generar una falsa sensación de seguridad y confianza, lo cual facilita el engaño y la intimidación.

Las autoridades investigan el caso para dar con los responsables del robo y llevarlos ante la justicia.

Se ha solicitado colaboración ciudadana a fin de identificar a los sospechosos.Este incidente pone de manifiesto la necesidad de tomar medidas adicionales para fortalecer la seguridad en las rutas nacionales y prevenir este tipo de delitos, que generan un impacto emocional profundo en las víctimas.