La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha activado avisos rojos por fuertes nevadas en el Pirineo oscense y navarro, así como en el valle de Arán (Lleida), ante la entrada de una masa de aire ártico que trae consigo un descenso significativo de las temperaturas, intensas ráfagas de viento y precipitaciones.
Las acumulaciones de nieve pueden superar los 40 centímetros en zonas por encima de los 1.200 metros, ha informado la Aemet, señalando que en zonas entre los 800 y 1.200 metros las cantidades serán inferiores.
En las zonas montañosas más elevadas se esperan ventiscas.
del Pirineo, otras siete comunidades autónomas se encuentran bajo aviso naranja por fuertes vientos o mala mar: Asturias, Baleares, Cantabria, Castilla y León, Galicia, País Vasco y Comunidad Valenciana.
Las rachas de viento pueden alcanzar hasta 90 kilómetros por hora, con posibilidad de superar los 120 km/h en las zonas altas, ha alertado la Aemet.
En el litoral, se prevé una intensa oleaje, con olas que podrían llegar a los 6 y 7 metros en algunos puntos del Cantábrico y el mar Balear.
Este fenómeno meteorológico afectará a gran parte de la Península y Baleares a lo largo de la jornada dominical, provocando un descenso térmico generalizado.
Se estima que las nevadas podrían alcanzar otros sistemas montañosos de la mitad norte peninsular, con posibilidad de extenderse a zonas adyacentes de la meseta norte.
Es probable que la cota de nieve se sitúe este domingo entre los 700 y 900 metros en el noreste peninsular y los 800 a 1.000 metros en el resto de la mitad norte, ha precisado la Aemet.
El impacto emocional de esta situación es palpable, con una sensación de incertidumbre y preocupación ante las fuertes nevadas que amenazan afectar la vida cotidiana de miles de personas.