El Congreso de Estados Unidos evitó in extremis el cierre del gobierno federal al aprobar una prórroga presupuestaria que extiende la financiación hasta el 14 de marzo de 2025.
La medida, aprobada tanto por el Senado como por la Cámara de Representantes con amplio apoyo bipartidista, pone fin a días de incertidumbre generados por las exigencias del presidente electo, Donald Trump, y su aliado Elon Musk.
La propuesta final excluía la demanda de Trump para eliminar el techo de la deuda, un punto que había provocado tensiones y obstruccionismo dentro del Congreso republicano.
Evitaron que los radicales republicanos cerraran el gobierno y derrumbasen la economía, declaró Hakeem Jeffries, líder de la minoría demócrata en la Cámara Baja.
El cierre gubernamental hubiera supuesto una grave crisis para el país, dejando a cientos de miles de trabajadores sin salario, paralizando agencias gubernamentales y cerrando espacios públicos como museos y parques nacionales.
La situación se había tensado considerablemente tras la decisión de Trump y Musk de desestabilizar un acuerdo previamente alcanzado por los legisladores republicanos y demócratas para continuar financiando el gobierno.
A través de tuits y llamadas telefónicas, presionaron a los miembros del Partido Republicano para que rompieran el pacto.
Mantuvimos contacto con Trump y Musk hasta último momento, afirmó Mike Johnson, presidente de la Cámara de Representantes, en una declaración pública tras la votación favorable.
Musk, quien ha sido criticado por algunos demócratas por ejercer como un presidente en la sombra, elogió la labor de Johnson en redes sociales.
Este episodio refleja las tensiones que se pueden esperar entre el gobierno entrante liderado por Trump y el Congreso, donde los republicanos tendrán el control a partir de enero.
Los analistas temen que la relación entre el presidente electo, Musk y el Congreso sea marcada por la confrontación y la inestabilidad política.