Privatización del Correo Argentino: un paso hacia la libertad del mercado o el fin de un servicio público?
El Ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, anunció la privatización del Correo Argentino, argumentando que la empresa ya no posee valor estratégico en la actualidad.
Este anuncio se produce en el marco del Decreto 100524 firmado por el Presidente Mauricio Macri, que desregula el mercado de correos y encomiendas postales.
El decreto es un paso clave para el desarrollo del comercio electrónico, afirmó Sturzenegger en redes sociales.
El ministro recordó que a diferencia de otros países, donde la gestión postal era considerada una obligación estatal, en Argentina la Constitución le delegó esta responsabilidad al Congreso.
La ley 20.216, promulgada durante la dictadura militar de Onganía, estableció el monopolio absoluto del correo oficial y otorgaba al Estado el poder de censurar la correspondencia.
Como una suerte de 1984, a la ley 20.216 no le interesaban los usuarios sino el control del Estado sobre la información que manejaban sus ciudadanos, denunció Sturzenegger.
El ministro celebró el decreto 118793, emitido en la década de 1990, que suprimió este monopolio y permitió la entrada de nuevos jugadores al sector.
No obstante, criticó las persistentes restricciones para acceder a la actividad postal, considerándolas eminentemente anti-pymes y anti-innovación.
El Decreto 100524 busca eliminar estas trabas eliminando completamente el proceso de habilitación para operar en el mercado postal.
Según Sturzenegger, cualquier persona jurídica que desee manejar correo podrá hacerlo, simplemente informando su actividad.
La normativa también extiende la posibilidad de digitalizar telegramas y documentos certificados, beneficiando a empresas e individuos con la firma digital remota.
Estas medidas, según VLLC, abrirán un nuevo e interesante negocio al permitir que cualquier actor pueda operar como punto de entrega y repartidor de envíos postales.
Se espera que esto impulse el desarrollo del comercio electrónico y genere nuevas fuentes de ingresos para comercios pequeños, canillitas, remiseros y plataformas digitales.
La privatización del Correo Argentino ha generado controversia, con algunos sectores argumentando que este servicio público esencial debe estar bajo control estatal para garantizar su accesibilidad y eficiencia.
Los críticos temen que la desregulación lleve a una mayor concentración del mercado en manos de grandes empresas, poniendo en riesgo la calidad del servicio postal en el país.