En un giro sorprendente, el expresidente estadounidense Donald Trump conectó por teléfono al actual mandatario ucraniano, Volodímir Zelensky, apenas horas después de su victoria electoral, según reveló recientemente The New York Times.

La llamada tuvo lugar en la lujosa mansión de Trump, Mar-a-Lago, en Palm Beach, Florida, y curiosamente contó con la presencia del magnate tecnológico Elon Musk.

Si bien el contenido de la conversación permanece envuelto en secreto, fuentes cercanas al evento confirmaron al citado medio que el tono de la llamada fue positivo.

La participación de Musk en este encuentro sin precedentes ha generado aún más intriga sobre los posibles temas abordados.

Esta acción de Trump ocurre en un contexto complejo y delicado para Ucrania, que continúa librando una guerra contra la invasión rusa.

El expresidente estadounidense ha prometido poner fin al conflicto durante su campaña electoral, aunque sus planes para lograrlo no han sido claros.

Algunos expertos temen que la postura de Trump podría implicar la aceptación de las conquistas territoriales rusas como parte del acuerdo de paz.

Esta preocupación se intensifica por el hecho de que Trump, en un debate previo a las elecciones, se negó a responder directamente si deseaba una victoria ucraniana o rusa.

Durante su mandato anterior, Trump criticó constantemente al presidente Biden por el envío continuo de fondos financieros y militares a Ucrania para combatir la invasión rusa.

La llamada telefónica entre Trump, Zelensky y Musk, sin duda, será objeto de análisis y debate en los próximos días, con potenciales implicaciones significativas para la guerra en Ucrania y las relaciones internacionales.