Una familia salteña dedicada a la venta de materiales de construcción enfrenta una compleja situación tras el hackeo del número de WhatsApp del titular de su empresa, Áridos y Ladrillos.
Los ciberdelincuentes están utilizando la cuenta comprometida para contactar a clientes, ofreciendo materiales a precios irregulares y llevando a cabo operaciones fraudulentas.
El propietario del negocio, Oscar Méndez, denunció el incidente ante las autoridades correspondientes, pero aún no ha logrado recuperar el control de su número.
Es nuestro principal canal de comunicación con los clientes, la base de nuestra actividad, afirma Méndez, quien describe la situación como un verdadero calvario para él y su familia.
La empresa solicita a sus clientes que sean cautelosos y eviten realizar cualquier tipo de transacción a través del número 3874527593 hasta que la cuenta sea recuperada.
Estamos trabajando en conjunto con las autoridades para revertir esta situación, pero necesitamos el apoyo de nuestros clientes para evitar más daños, agrega Méndez.
El caso refleja la creciente amenaza que representan los ciberataques a nivel global y su impacto directo en pequeñas empresas.
Especialistas advierten sobre la necesidad de implementar medidas de seguridad robustas para proteger datos personales y financieros de accesos no autorizados.