El Tribunal de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios del Poder Judicial y Ministerio Público ha dado un paso significativo en el caso contra el juez Francisco Oyarzú, corriendo vistas para que responda a la acusación formulada por el Procurador General de la Provincia, Pedro García Castiella.

La reunión del jurado, presidida por la presidenta de la Corte de Justicia, Teresa Ovejero, marca un momento crucial en la investigación sobre presuntas irregularidades en el desempeño de Oyarzú, quien se enfrenta a una imputación por mal desempeño.

Se le otorga un plazo de diez días para presentar su defensa ante las acusaciones y aportar pruebas que sustenten su versión.

Este proceso es fundamental para garantizar la transparencia y la justicia en nuestro sistema judicial, afirmó una fuente cercana al caso.

Es importante que se le dé la oportunidad al juez Oyarzú de defenderse y presentar sus argumentos, pero también es crucial que se investigue a fondo las acusaciones contra él.

El mal desempeño, según expertos legales, abarca una amplia gama de infracciones, desde la negligencia en el cumplimiento de funciones hasta la falta de imparcialidad o la violación de normas procesales.

La gravedad del caso y la posición del juez Oyarzú dentro del sistema judicial han generado un gran revuelo en la comunidad legal salteña.

El futuro de la carrera profesional del juez Oyarzú pende ahora de esta investigación, que promete ser larga y compleja.

El resultado tendrá repercusiones significativas para la confianza pública en el Poder Judicial provincial.