El monumento erigido en memoria de Cassandre Bouvier y Houria Moumni, dos jóvenes francesas asesinadas en Salta en 2011, se encuentra al borde del colapso.
Este símbolo que busca denunciar la violencia contra las mujeres está afectado por el paso del tiempo y el olvido, reflejando la frustración persistente en torno a la falta de justicia en este caso.
El padre de Cassandre, Jean Michel Bouvier, describe el monumento como una metáfora de la investigación judicial, plagada de inconsistencias e irregularidades.
Críticas que se extienden a las pruebas presentadas por la justicia argentina, calificadas por expertos como plantadas, inventadas y manipuladas.
La causa ha sido objeto de numerosas controversias desde el inicio.En 2014, tres hombres fueron condenados por el doble femicidio: Gustavo Lasi recibió 30 años de prisión, mientras que Daniel Vilte y Santos Clemente Vera fueron absueltos.
En 2016, Vera fue condenado a cadena perpetua al considerar un recurso de casación.La Corte Salteña rechazó su apelación y finalmente, en diciembre de 2023, la Corte Suprema ordenó su liberación tras una década de prisión.
La decisión de la Corte Suprema ha generado nuevas dudas y ha reavivado las acusaciones de manipulación judicial.
Jean Michel Bouvier asegura que el gobierno francés espera que se reabra la investigación para colaborar con expertos internacionales y tecnología que puedan aportar a la búsqueda de la verdad.
El embajador de Francia en Argentina, Romain Nadal, expresó su confianza en que se pueda llegar a la justicia y remarcó la importancia de que los responsables no escapen a la ley.
El periodista francés Jean Charles Chatard, autor del libro Francesas: Autopsia de un doble asesinato, ha sido crítico con el manejo del caso por parte de las autoridades argentinas.
En su libro expone una minuciosa investigación que revela serias irregularidades en la investigación y el juicio original.
La situación actual deja al caso en un punto muerto, con el monumento a las víctimas deteriorándose mientras Bouvier exige justicia y la verdad tras nueve meses de la liberación de Vera.
La sombra del olvido amenaza con consumir este caso emblemático que pone en evidencia las fallas del sistema judicial argentino en la lucha contra la violencia contra las mujeres.