El pasado 28 de julio, Venezuela vivió una jornada electoral donde tanto el chavismo como la oposición se adjudicaron la victoria.
Una polémica rodea el proceso: la falta de transparencia en la publicación de las actas electorales.
Mientras la oposición ha exhibido públicamente copias de las actas que certifican el triunfo del candidato Edmundo González Urrutia, el gobierno venezolano permanece en silencio.
Diosdado Cabello, primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), ha afirmado en su programa semanal Con el mazo dando que el Consejo Nacional Electoral (CNE) nunca ha publicado actas electorales en la historia del país.
Esta afirmación contradice hechos históricos.En las elecciones de 2013, Jorge Rodríguez, entonces alcalde de Caracas y jefe del Comando de Campaña Hugo Chávez de Nicolás Maduro, mostró a la prensa copias de las actas electorales.
Nosotros, igual que ustedes, tenemos 38.900 de estas, que son las actas de votación y en todas esas actas de votación aparece la firma de su testigo con la huella dactilar, declaró Rodríguez en esa ocasión, además de afirmar que las actas fueron publicadas en el sitio web del PSUV.
Esta incongruencia ha generado críticas por parte de la comunidad internacional.
Jennie Lincoln, jefa de la misión de observación del Centro Carter, afirmó que no hay evidencia de que el sistema electoral de Venezuela fuese blanco de un ataque informático durante las elecciones del 28 de julio.
Lincoln también señaló que la transmisión de los datos electorales se realiza por línea telefónica y teléfono satelital, no por computadora, descartando así la posibilidad de una manipulación cibernética.
La oposición venezolana ha publicado copias de más del 80% de las actas electorales en un sitio web, asegurando que prueban el triunfo de Edmundo González Urrutia.
El CNE, por otro lado, le dio a González Urrutia 43 votos frente a 52 de Nicolás Maduro.
La falta de transparencia del gobierno venezolano y la contradicción en sus propias declaraciones han generado una crisis de confianza en el proceso electoral.
La comunidad internacional exige al CNE publicar las actas electorales para garantizar un recuento transparente y confiable.