Tras casi dos décadas de esfuerzos internacionales, una nueva investigación revela que la gran mayoría de las políticas climáticas implementadas a nivel mundial no han logrado reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero.
Un estudio del Instituto de Investigación sobre el Impacto Climático de Potsdam PIK (PIK), utilizando inteligencia artificial para analizar 1.500 políticas aplicadas en 41 países entre 1998 y 2022, encontró que solo 63 han mostrado resultados efectivos en la reducción de emisiones.
Las políticas exitosas, según el estudio publicado en la revista Science, comparten una característica clave: la incorporación de incentivos fiscales y mecanismos de precios del carbono.
Si más países confiasen en este tipo de políticas, podríamos cerrar la brecha de emisiones para 2030 entre un 26% y un 41% , afirma Nicolas Koch, uno de los responsables del estudio.
Para limitar el calentamiento global a 1,5C, como se acordó en el Acuerdo de París, se necesita una reducción drástica de las emisiones globales de gases de efecto invernadero: un 43% para 2030 y un 60% para 2035 respecto a los niveles de 2019.
El estudio subraya la importancia de combinar diferentes instrumentos para lograr resultados efectivos, contradiciendo la idea de que las combinaciones de políticas pueden ser redundantes.
No existe una sola medida que destaque.La combinación es crucial, señala Koch.Observamos numerosos paquetes que dependen de subsidios y regulaciones, pero estas herramientas por sí solas resultan insuficientes.
En países en desarrollo, los mecanismos de fijación de precios se mostraron menos efectivos, lo que indica la necesidad de complementarlas con medidas regulatorias o ayudas directas.
Esther AnayaBoig, consultora e investigadora independiente especializada en movilidad ciclista, coincide con este análisis: Mi trabajo durante años se ha centrado en una visión integral de la movilidad ciclista.
Construir solo infraestructuras no es suficiente; hay que atender a la gobernanza, la educación, la información, los movimientos sociales, la normativa y la planificación.
A pesar de las dificultades, el estudio destaca un crecimiento notable en el número de políticas climáticas implementadas en los últimos años.
En 2022, el promedio de políticas por país osciló entre cuatro y ocho.El estudio identifica ejemplos concretos de éxito como las políticas del sector del transporte en España, el sector energético en el Reino Unido y el sector automotriz en Noruega, que han logrado una reducción significativa en emisiones.
Este análisis arroja luz sobre la urgencia de evaluar con rigor las políticas climáticas existentes y fortalecer aquellas que han demostrado ser efectivas.
La investigación pone de manifiesto la necesidad de un enfoque más integral y colaborativo para afrontar el desafío del cambio climático a nivel mundial.