El presidente electo estadounidense, Donald Trump, ha suscitado controversia al nombrar a los actores Sylvester Stallone, Mel Gibson y Jon Voight como embajadores especiales en Hollywood.
La medida, anunciada a través de su red social Truth Social, busca revitalizar la industria cinematográfica, que según Trump ha sufrido un declive en los últimos años.
Me ayudarán como enviados especiales para que Hollywood, que en los últimos cuatro años ha perdido muchos negocios en el extranjero, vuelva más grande, mejor y más fuerte que nunca, afirmó Trump.
El presidente electo atribuye este deterioro a diversos problemas presentes en la industria, aunque no los especifica.
A través de este cargo, busca mejorar la situación desde una perspectiva empresarial.
Estos tres hombres talentosos serán mis ojos y mis oídos.
Haré lo que me sugieran, indicó Trump, mostrando su confianza en el poderío de los nuevos embajadores.
La decisión ha generado reacciones mixtas.Algunos expertos ven un intento de Trump de fortalecer sus lazos con la industria del entretenimiento, mientras que otros consideran que el nombramiento es una estrategia para influir en la narrativa y silenciar críticas hacia su gestión.
Stallone, Gibson y Voight son figuras prominentes en Hollywood, pero también han estado envueltos en controversias en el pasado.
Stallone fue maestro de ceremonias en una cena posterior a la victoria electoral de Trump, donde lo calificó como el segundo George Washington.
Gibson ha sido objeto de críticas por sus comentarios sobre grupos raciales y religiosos, mientras que Voight es conocido por sus opiniones políticas conservadoras.
La incertidumbre se cierne sobre el futuro de Hollywood bajo la tutela de estos nuevos embajadores.
Solo el tiempo dirá qué impacto tendrán en la industria y cómo la comunidad artística responderá a esta inusual medida.
