Una tormenta de inusual intensidad azotó la provincia de Salta dejando tras de sí un panorama de destrucción y afectaciones severas en diversas localidades.

Las fuertes precipitaciones, concentradas principalmente en el norte provincial, desbordaron ríos y arroyos, inundando barrios vulnerables y generando un escenario de caos.

Según datos meteorológicos oficiales, Orán se convirtió en el epicentro del fenómeno con la acumulación de 71 milímetros de lluvia en las últimas 24 horas.

Le siguen Salta capital con 48 mm, San Salvador de Jujuy con 29 mm y San José de Metán con 10 mm.
Las consecuencias de este evento climático extremo son palpables: barrios enteros se encuentran anegados, lo que dificulta el tránsito vehicular y peatonal.

La situación es crítica en muchos sectores, declaró un habitante afectado de Orán.El agua llegó hasta los techos de nuestras casas, perdimos muebles y pertenencias.

La incertidumbre sobre cuándo la tormenta cesará nos genera mucha angustia.
de las inundaciones, se reportaron cortes de energía eléctrica en el norte provincial, sumando a la desesperación de los afectados que se enfrentan a la falta de servicios básicos durante estos momentos críticos.

El impacto emocional de este tipo de eventos es inmenso, explicó una psicóloga especializada en crisis.

La pérdida material y la sensación de vulnerabilidad ante fuerzas naturales generan un estrés post traumático que requiere atención especial.

Las autoridades provinciales trabajan arduamente para brindar asistencia a los damnificados, implementando medidas de emergencia para controlar las inundaciones y restablecer los servicios públicos.