Cataluña se encuentra bajo el impacto devastador de una Dana que ha dejado un saldo provisional de 214 personas fallecidas, cifra que podría aumentar según las autoridades.
La comunidad autónoma ha sido escenario de intensas lluvias, vientos huracanados y granizo, provocando inundaciones catastróficas, cortes en carreteras y suspensiones del transporte público.
El Servei Meteorològic de Catalunya (SMC) ha emitido un aviso por tiempo violento en varias comarcas de Barcelona y Tarragona, donde se decreta un grado máximo de peligro.
Protección Civil ha enviado alertas a los teléfonos móviles en la comarca del Baix Llobregat, Garraf, Barcelona, Barcelonès Maresme, Vallès Oriental, Vallès Occidental y la Selva, recomendando no recoger a los niños de las escuelas debido a que representan un lugar seguro.
Rodalies, el servicio ferroviario regional, ha suspendido completamente su servicio por la previsión de lluvias torrenciales, granizo de más de dos centímetros de diámetro, ráfagas de viento superiores a 25 metros por segundo y posibles tornados o mangas.
Las autoridades han instado a la población a extremar las precauciones, evitar desplazamientos innecesarios y mantener distancia de rieras y barrancos, incluso en momentos sin lluvias intensas.
El teléfono de emergencias 112 ha recibido más de 1.103 llamadas hasta las 11 horas del lunes, generando 925 expedientes.
La comarca del Tarragonès se ha visto más afectada con 346 avisos, seguida por el Baix Llobregat (322) y el Barcelonès (74).
Diversos hospitales de la región han suspendido actividades programadas no urgentes debido a las dificultades de acceso generadas por las inundaciones.
El Govern de Salvador Illa emitió una alerta por el temporal el domingo por la tarde, suspendiendo clases y actividades deportivas en nueve comarcas del sur de Cataluña.
Se limitó la movilidad hasta las 14 horas del lunes, permitiendo únicamente el tránsito de vehículos esenciales y amenazando con sanciones para los que incumplan la medida.
La Universidad de Barcelona (UB), la Autónoma de Barcelona (UAB) y la Pompeu Fabra (UPF) han cancelado todas sus actividades académicas en sus respectivos centros.
La Universitat Politècnica de Cataluña (UPC) ha suspendido las clases a partir de las 14 horas, mientras que la UVicUCC lo hará desde las 12 del mediodía.
El TRAM en Barcelona también está sufriendo alteraciones por las lluvias, con algunas estaciones de metro interrumpidas.
La línea L9 solo circula entre Parc Nou y Collblanc, y entre este punto y Zona Universitaria.En la línea L3, no se paran en la estación de Liceu, y el acceso a las estaciones de Parallel, Pelai (Plaza Cataluña) y García Lorca (Canyelles) está cerrado.
El Aeropuerto de El Prat también ha sido afectado por las lluvias, con la cancelación o retraso de cerca de cincuenta vuelos debido a las condiciones climáticas adversas.
Las carreteras catalanas se han visto afectadas por derrumbes e inundaciones, cortando la circulación en puntos estratégicos.
El ministro de Transportes, Óscar Puente, ha anunciado la constitución de un comité de crisis para hacer seguimiento de la repercusión del temporal en la infraestructura catalana.
Glovo ha suspendido temporalmente su servicio en Barcelona debido a las malas condiciones meteorológicas y para garantizar la seguridad de sus usuarios.
El impacto emocional de este evento es innegable. Las imágenes de carreteras inundadas, viviendas destrozadas y personas afectadas por el temporal han conmovido al país, generando una gran preocupación por la situación.