Un escándalo político sacude al Partido Justicialista argentino tras la decisión de la Junta Electoral de rechazar la lista del gobernador riojano Ricardo Quintela, Federales, un grito de corazón, por falta de avales.

La resolución, que deja en suspenso la candidatura de Quintela frente a Cristina Kirchner, ha detonado fuertes críticas y acusaciones de privatización del partido.

La Junta Electoral señaló que la lista presentó 70.531 registros en formato digital, pero solo 60.755 avales válidos fueron contabilizados en las planillas presentadas.

De estos, 6.809 se consideran inválidos por falta de documentación y 5.195 presentan inconsistencias en la identificación o firmas.

Se otorgó a Quintela un plazo de 24 horas para subsanar estas deficiencias y demostrar el respaldo mínimo exigido para su candidatura.

Quintela, quien aspiraba a competir con Kirchner en las elecciones internas del partido, rechazó la decisión calificándola como un intento de privatización del partido.

En un comunicado, afirmó que la resolución confirma que el conjunto de dirigentes que creen que se pueden llevar todo puesto con maniobras, argucias legales y chicanas reglamentarias sigue controlando el partido.

Desde que un grupo de compañeros empujaron a Cristina a irrumpir en el escenario de la disputa electoral interna del partido, lo que podría haber sido un camino de apertura, participación y democracia se convirtió en un tortuoso proceso de obstaculización, chicanas, caza de brujas, persecución y aprietes políticos a compañeros y compañeras de todo el país, denunció.

La situación genera una profunda incertidumbre en el seno del peronismo argentino.Quintela, con gran apoyo popular en su provincia, representa una alternativa al liderazgo de Kirchner, quien busca recuperar la conducción del partido tras su alejamiento de la política nacional durante los últimos años.

El rechazo a su candidatura podría significar un golpe para aquellos sectores que abogaban por una renovación interna y un alejamiento del estilo político tradicional del partido.