La comunidad oranense sigue conmovida tras las acusaciones de obstrucción a la investigación del homicidio de César Martínez, alias Oreja, contra el ex intendente de Aguas Blancas, Carlos Alfredo Conejo Martínez, y su abogado, Roberto Ortega Serrano.

La Unidad Fiscal de Orán, encargada del caso, anunció que apelará la decisión del juez Fernando Raúl López, quien rechazó el pedido de prisión preventiva para los imputados y optó por el arresto domiciliario.

Los fiscales argumentaron que la divulgación de información reservada sobre allanamientos durante las investigaciones causó un daño irreparable al proceso, notificando a los sospechosos antes de su ejecución.

Según ellos, esta acción buscaba entorpecer las pesquisas y evitar una justicia efectiva.

El riesgo no es solo de fuga, explicó un portavoz del Ministerio Público Fiscal.

Es principalmente el riesgo de que los imputados continúen con conductas que obstruyan la investigación.

Señalan que, aunque el juez reconoció la vinculación de Conejo Martínez y Ortega Serrano con el crimen, su decisión de conceder el arresto domiciliario sin medidas más estrictas como dispositivos electrónicos de monitoreo, resulta insuficiente para garantizar una imparcial investigación.

La Unidad Fiscal también critica la falta de consideración del contexto socio-político que rodea este caso.

El estado de conmoción social generado por los hechos investigados no fue adecuadamente ponderado en la decisión judicial, indicaron fuentes cercanas a la fiscalía.

La comunidad oranense espera justicia y un esclarecimiento rápido de los hechos.Mientras tanto, el juez Claudio Parisi también analiza una posible apelación a su propia situación procesal, según indicaran sus representantes legales.