Abu Dhabi se prepara para albergar la segunda Sphere del mundo: ¿Un nuevo paradigma para el entretenimiento?

Las megaconstrucciones se han convertido en una característica distintiva de la arquitectura moderna, con ejemplos icónicos como Neom The Line en Arabia Saudita, el primer hotel impreso en 3D en Texas y el rascacielos completamente eléctrico de Nueva York.

Un nuevo gigante está emergiendo en el horizonte: la Sphere, una estructura esférica futurista que promete redefinir el concepto de entretenimiento.

Tras el éxito de la primera Sphere inaugurada en Las Vegas, Emiratos Árabes Unidos se prepara para albergar la segunda de estas maravillas arquitectónicas en Abu Dhabi.

Con un coste estimado de más de 2.000 millones de dólares, esta megaconstrucción no solo busca ser una atracción turística excepcional sino que aspira a convertirse en un referente global en experiencias inmersivas.

Sphere Entertainment, el grupo estadounidense responsable del proyecto, ha anunciado su colaboración con el Departamento de Cultura y Turismo de Abu Dhabi para materializar este ambicioso plan.

Esperamos que este medio de entretenimiento de próxima generación sea una incorporación histórica a esta capital internacional de primer nivel, elevando la oferta de entretenimiento tanto para residentes como para visitantes, se afirma en un comunicado oficial.

La Sphere de Abu Dhabi no solo replicará la capacidad de su predecesora (20.000 personas), sino que buscará superar las expectativas con tecnología avanzada y una narrativa cautivadora, según palabras de Mohamed Khalifa Al Mubarak, presidente del DCT Abu Dhabi: Sphere Abu Dhabi integrará a la perfección tecnología avanzada con una narración cautivadora, creando recuerdos inolvidables para todos los que lo visiten.

Esta iniciativa no solo representa un impulso económico para la región, sino que también busca posicionar a Abu Dhabi como líder en el sector del entretenimiento.

La apuesta por este tipo de experiencias inmersivas refleja una tendencia global hacia la búsqueda de nuevas formas de ocio y cultura.

Algunos expertos cuestionan si esta carrera por las megaconstrucciones podría tener consecuencias negativas en términos de sostenibilidad ambiental y social.