Salta, provincia ubicada en el noroeste argentino, se enfrenta a un desafío silencioso pero constante: la desaparición de personas.

Entre cinco y siete veces al día, las alertas se disparan en la Policía provincial, activando protocolos de búsqueda que reflejan una creciente preocupación por la seguridad y el bienestar de sus ciudadanos.

Las ausencias, que pueden abarcar desde adolescentes hasta ancianos, generan un eco de angustia en familias enteras y movilizan recursos significativos para su localización.

Cada caso es un puzzle que debemos resolver, señala un oficial de la Policía provincial con experiencia en investigaciones de personas desaparecidas.

Las circunstancias son diversas: fuga de hogar por problemas familiares, consumo de sustancias, crisis de salud mental, o simplemente la vulnerabilidad de algunas personas que se pierden sin dejar rastro.

Las estadísticas revelan una realidad preocupante.Según datos oficiales, el promedio diario de activaciones del protocolo de búsqueda en Salta oscila entre 5 y 7 casos.

La causa más común se relaciona con ausentismo voluntario, un término que engloba múltiples factores como conflictos familiares, problemas relacionados con el consumo de drogas o trastornos mentales.

También existen situaciones donde las personas extraviadas carecen de los recursos para regresar a casa por sí mismas debido a su vulnerabilidad, o simplemente desaparecen sin dejar rastro alguno, generando un manto de incertidumbre y temor.

La complejidad reside en la diversidad de los casos, explica una psicóloga especializada en trabajo con familias afectadas por desapariciones.

Cada persona tiene una historia, un contexto personal que debemos comprender para poder actuar eficazmente.

Algunas son situaciones transitorias, otras más serias que requieren intervención profesional.

El Registro de Personas Extraviadas, implementado en Salta desde el año 2016, ha registrado más de 21 mil búsquedas.

Esta cifra no representa necesariamente 21 mil personas diferentes, sino múltiples activaciones para las mismas personas en reiterados casos.

La reincidencia es un factor preocupante, especialmente entre pacientes psiquiátricos, niños y ancianos.

La Policía de Salta despliega todos sus recursos cada vez que se reporta una desaparición. Equipos especializados en búsqueda y rescate trabajan incansablemente, coordinando esfuerzos con la comunidad para rastrear a las personas desaparecidas.

La colaboración ciudadana juega un papel fundamental en estas operaciones.
El 99% de las personas denunciadas como desaparecidas son encontradas o regresan por sus propios medios, informa una fuente policial.

Este alto índice de resolución es el resultado del trabajo coordinado entre la Policía y la comunidad.

No obstante, los casos que quedan sin resolver representan un dolor silencioso para las familias afectadas.

Las estadísticas también revelan un patrón preocupante: la cifra de reportes tiende a aumentar los lunes y martes, días posteriores al fin de semana, cuando se asume que el riesgo de ausencias y desapariciones aumenta.

Este fenómeno invita a reflexionar sobre las causas subyacentes a estos casos y a buscar soluciones integrales para abordar la problemática.

Se requiere una mirada multidisciplinaria que involucre no solo a las fuerzas policiales, sino también a psicólogos, trabajadores sociales y especialistas en salud mental.

La búsqueda de personas desaparecidas es un desafío constante para Salta.Es un llamado a la acción que exige una respuesta contundente y coordinada para proteger a los ciudadanos más vulnerables y brindar esperanza a sus familias.