El reconocido economista Daniel Artana, Jefe de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL), ha analizado dos posibles escenarios económicos para el Gobierno de Javier Milei en el mediano plazo.
Estas proyecciones, presentadas durante la 117 Edición de la Expo Rural Rafaela 2024, ofrecen una visión sobre el panorama económico hasta las elecciones de 2025 y podrían impactar significativamente en la inflación.
El primer escenario, al que Artana denomina Plan A, prioriza la reducción de la inflación, un objetivo crucial para Milei, quien ha logrado mantener una buena imagen pública a pesar del ajuste económico implementado.
Este plan se basa en el mantenimiento del crawling peg, con microdevaluaciones diarias del peso contra el dólar oficial en el rango actual del 2% mensual, con una posible desaceleración de su ritmo durante el próximo año.
Este escenario, según Artana, evitaría una devaluación abrupta y mantendría la inflación en niveles moderados, aunque por encima de la depreciación del tipo de cambio, tal como ocurre actualmente.
La recuperación económica sería lenta en 2025, con una inflación promedio mensual proyectada alrededor del 3,1% hasta finales del año y del 2,4% para el 2025.
Esta cifra anual se traduciría en un índice superior al 30%, lejos del objetivo del 18% establecido por el Gobierno en el Presupuesto.
Para Milei, este escenario sería ideal ya que le permitiría llegar a las elecciones de mitad de mandato con una economía mostrando una inflación más baja, lo que podría traducirse en buenos resultados electorales.
Para Artana, la viabilidad de este escenario depende de varios factores: que entre plata, que ahora al Gobierno le vaya bien con el blanqueo, que entre algo de financiamiento al sector privado, requiere que entren dólares o que recupere la soja, es decir, que de repente haya más dólares, explica.
En contraste, el segundo escenario planteado por Artana se torna más complejo para Milei.Si el Plan A no funciona y el Gobierno no logra captar suficientes fondos, podría verse obligado a recurrir al Fondo Monetario Internacional (FMI) antes de diciembre de 2024.
En este caso, el FMI exigiría reformas estructurales y una corrección del tipo de cambio oficial, es decir, una nueva devaluación, lo que probablemente desencadenaría un aumento en la inflación a corto plazo.
El FMI te va a decir: No dólar blend, no Impuesto PAÍS que se cae en diciembre y, como tenés atraso cambiario, tocá el tipo de cambio oficial, señala Artana.
Esta situación afectaría la popularidad del Gobierno en un momento crítico, previo a las elecciones de mitad de mandato.
A pesar de ello, Artana resalta que no se acaba el mundo si Milei debe recurrir al FMI y realizar una nueva devaluación.
Con la corrección fiscal que hiciste y el programa estructural que están haciendo en materia de reformas, que es bastante ambicioso, no se acaba el mundo, argumenta.
El verdadero impacto a analizar sería el efecto en la popularidad de Milei previo a las elecciones.
Los próximos meses serán cruciales para la economía argentina.Las decisiones que tome el Gobierno no solo influenciarán la gestión de la inflación, sino que también tendrán repercusiones políticas significativas en el contexto electoral.