El crecimiento excepcional del empleo formal privado en Salta, que contrastaba con la tendencia a la baja observada en el resto del país, parece haber llegado a su punto máximo en mayo pasado.
Según datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), publicados por la Secretaría de Trabajo, se registraron 126.300 trabajadores formales en la parte privada en el quinto mes del año.
Si bien este número representa un crecimiento del 2,4% respecto al mismo mes de 2023, la medición desestacionalizada (que elimina las fluctuaciones propias de ciertas épocas) indica que el nivel se mantiene similar al de abril.
Salta, junto con Neuquén y Tucumán, son las únicas provincias que mostraron un crecimiento laboral en el ámbito privado durante mayo en comparación interanual, mientras que el resto del país continúa experimentando una contracción significativa del empleo en este sector.
Este fenómeno, particularmente notable en la construcción, se vincula directamente con la actividad minera.
La reciente caída en los precios internacionales del litio ha impactado las operaciones mineras locales, generando un freno en la creación de empleos en este sector clave para la economía salteña.
La minería ha sido el motor principal del crecimiento laboral en Salta en los últimos años, explica , analista económico especializado en la región.
La volatilidad del mercado global y las variaciones en los precios de los commodities tienen un impacto directo en la actividad minera y, por ende, en la generación de empleo.
Un informe reciente del Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric) confirma esta tendencia, mostrando que Salta es la única provincia que registró un incremento en los puestos formales de la construcción en mayo respecto al mismo mes del año anterior.
A nivel nacional, el empleo formal se ha contraído por noveno mes consecutivo, alcanzando su peor nivel desde abril del año pasado.
Desde diciembre, se han perdido más de 175.000 puestos de trabajo asalariado formales.
La situación genera preocupación entre los sectores laborales y económicos, debido al impacto en la calidad de vida de las personas y en el desarrollo económico regional.
Es fundamental que las autoridades implementen políticas públicas que promuevan la diversificación económica y mitiguen los efectos del ciclo minero, afirma , representante de un sindicato local.
El futuro laboral de Salta dependerá, en gran medida, de la capacidad para adaptarse a los cambios en el mercado global y para fomentar la creación de nuevas fuentes de empleo que no dependan únicamente de sectores vulnerables a las fluctuaciones económicas internacionales.