El dolor de espalda es una problemática global que afecta a millones de personas.La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que hasta el 80% de la población experimentará dolor lumbar en algún momento de sus vidas.
Ante esta realidad, la endoscopia de columna surge como una alternativa mínimamente invasiva con prometedores resultados para mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Existen múltiples causas que pueden originar dolor lumbar, entre ellas:
Problemas musculares y ligamentosos: provocados por esfuerzos excesivos, movimientos bruscos o posturas incorrectas.
Hernia de disco: el desgarro o desgaste de los discos intervertebrales puede comprimir nervios provocando dolor intenso.
Degeneración de disco: con la edad, la flexibilidad y amortiguación de los discos se reduce, dando lugar al dolor.
Estenosis espinal: el estrechamiento del canal vertebral ejerce presión sobre la médula espinal y los nervios.
Fracturas vertebrales: a menudo causadas por osteoporosis, pueden ser extremadamente dolorosas.
Enfermedades inflamatorias: afecciones como la artritis reumatoide pueden inflamar las articulaciones de la columna vertebral.
La endoscopia de columna se realiza mediante una pequeña incisión a través de la cual se introduce un endoscopio, un tubo flexible con cámara y herramientas quirúrgicas que permite visualizar y tratar estructuras internas de la columna vertebral con mayor precisión que las cirugías abiertas tradicionales.
Beneficios de la endoscopia:
El Dr. Gabriel Sánchez Mazariegos, especialista en Cirugía Ortopédica y Traumatología del hospital Ribera Juan Cardona, destaca que cada caso debe ser evaluado individualmente pero la endoscopia ofrece posibilidades para tratar patologías que antes no se podían operar con éxito.
Entre las principales ventajas de esta técnica se encuentran:
Incisiones menores: reduciendo el trauma tisular y el riesgo de infección.
Recuperación más rápida: con menor dolor postoperatorio y tiempos de recuperación más cortos. Menor estancia hospitalaria: muchas endoscopias son ambulatorias, permitiendo a los pacientes regresar a casa el mismo día.
Menor uso de anestesia general: frecuentemente se utiliza anestesia local, minimizando los riesgos asociados a la anestesia general.
La endoscopia de columna es particularmente recomendada para:
Hernia de disco: en casos que no responden a tratamientos conservadores.
Estenosis espinal: descomprimir el canal espinal con mayor precisión y menor invasión que la cirugía tradicional.
Síndrome del dolor facetario: tratar el dolor proveniente de las articulaciones facetarias. Algunas fracturas vertebrales: estabilizar fracturas sin necesidad de grandes incisiones.
Es importante recordar que esta información no sustituye la consulta con un médico.Un profesional sanitario podrá determinar si la endoscopia de columna es la mejor opción para cada caso individual.