Julian Assange, fundador de WikiLeaks, ha sido liberado tras declararse culpable de cargos relacionados con espionaje.
La decisión ha generado un debate global sobre los límites de la libertad de expresión y la responsabilidad de quienes revelan información confidencial.
Assange, quien se convirtió en una figura controvertida para gobiernos y ciudadanos por igual, fue acusado durante el mandato del expresidente Donald Trump por la publicación masiva de documentos clasificados estadounidenses a través de WikiLeaks.
Los archivos filtrados por Chelsea Manning, exanalista de inteligencia militar, incluían cables diplomáticos, relatos de batallas e incluso un video que mostraba un ataque de un helicóptero estadounidense en Irak, causando la muerte de civiles y periodistas.
La liberación de Assange ha sido recibida con diferentes reacciones.Su abogado declinó hacer comentarios al respecto.
Por otro lado, el gobierno australiano expresó su satisfacción por la decisión, recordando las declaraciones del primer ministro Anthony Albanese sobre la innecesaria prolongación del caso.
Muchos defensores de la libertad de prensa critican la acusación contra Assange y argumentan que no debería ser considerado un espía al actuar como editor de WikiLeaks.
Afirman que el caso representa una amenaza para la libertad de expresión y la capacidad de los medios de informar sobre las acciones del gobierno.
La persecución a Julian Assange por publicar información de interés público es un precedente peligroso que daña la democracia y la transparencia, señaló , experto en derechos humanos y libertad de prensa.
La sentencia impuesta a Assange, que ha pasado más de cinco años encarcelado en Belmarsh, se asemeja a la que recibió Reality Winner, excontratista de inteligencia estadounidense, por revelar información clasificada al medio The Intercept.
Este caso ha sido visto por algunos como un ejemplo del gobierno estadounidense utilizando leyes anti-espionaje para reprimir las filtraciones y proteger sus intereses.
La liberación de Assange abre un debate sobre el papel de los medios en la era digital y las consecuencias de revelar secretos gubernamentales.
El impacto a largo plazo de esta decisión aún está por verse, pero sin duda marcará un hito importante en la historia de la libertad de prensa y la responsabilidad de quienes revelan información sensible.