El gobierno argentino ha anunciado la reapertura de la primera etapa del programa de blanqueo de capitales para aquellos contribuyentes que no pudieron finalizar el proceso de adhesión al régimen.

La medida, dispuesta por el ministro de Economía, Luis Caputo, busca brindar una nueva oportunidad a quienes, debido a circunstancias imprevistas o dificultades sistémicas, no lograron completar los pasos necesarios para regularizar sus activos.

La norma establece que la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) dictará las normas correspondientes para que aquellos que ya habían ingresado dinero efectivo en las cuentas especiales CERA o en Agencias de Liquidación y Compensación (ALyC), puedan culminar el trámite de adhesión hasta el 6 de diciembre de 2024.

Esta medida responde a la necesidad de facilitar el acceso al blanqueo para todos los contribuyentes, reconociendo que existen situaciones excepcionales que pueden impedir la finalización del proceso dentro del plazo establecido, explicó un funcionario del Ministerio de Economía.

Hasta la fecha, se han regularizado US$ 23.321 millones en efectivo a través de la primera etapa del blanqueo, según datos de la ARCA. De este total, US$ 20.631 millones corresponden a depósitos realizados en cuentas especiales CERA y ALyC. La segunda etapa, que comenzó el 1 de noviembre, tiene como plazo para realizar la manifestación y pago adelantado hasta el 31 de enero de 2024.

La flexibilización del plazo para la adhesión al régimen de blanqueo es una muestra del compromiso del gobierno con la transparencia financiera y la lucha contra la evasión fiscal, afirmó un experto en finanzas.

Esta medida no solo permite regularizar activos sin declarar, sino que también contribuirá a fortalecer el sistema financiero nacional, agregó.

El programa de blanqueo ofrece diferentes etapas para facilitar la regularización de capitales, cada una con plazos específicos para la presentación de declaraciones juradas y el pago correspondiente.

La alícuota aplicable varía según la etapa en la que se realice la declaración, oscilando entre un 10% y un 15%.

El gobierno tiene la facultad de extender el plazo de blanqueo hasta el 31 de julio de 2025.
La reapertura del proceso de blanqueo genera expectativas en el sector financiero y tributario, ya que se espera que permita aumentar la cantidad de activos regularizados y contribuir a la consolidación de un sistema financiero más transparente y robusto.