La localidad de Alto La Sierra, ubicada en Santa Victoria Este, se encuentra inmersa en un clima de inestabilidad tras una escalada de conflictos entre comunidades originarias y habitantes criollos.
En respuesta a esta situación, el Ministerio de Seguridad provincial reforzó la presencia policial en la zona mediante un operativo encabezado por el subjefe Walter Toledo.
El operativo incluye la participación de la División de Infantería y la Policía Comunitaria, quienes llevan a cabo patrullajes intensivos en zonas estratégicas, controles en locales comerciales que venden bebidas alcohólicas y revisiones vehiculares en los accesos a la localidad.
La llegada del subjefe Toledo ha traído un alivio momentáneo, pero la tensión sigue latente, declaró una fuente policial anónima.
El conflicto se intensificó en las últimas semanas tras un incidente donde miembros de la comunidad Wichí quemaron la vivienda de un criollo acusado de tráfico de drogas y abuso sexual de menores.
Esta acción violenta precipitó la intervención del gobierno provincial y autoridades locales, quienes buscan mediar entre ambas partes para evitar que la situación empeore.
Es necesario actuar con rapidez en relación a los temas de tierra y venta de drogas, señalaron fuentes policiales presentes en una reunión convocada por Toledo donde participaron referentes originarios y criollos.
La comunidad Wichí exige el cumplimiento de la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que les otorgó alrededor de 400.000 hectáreas, mientras que los criollos reclaman un reparto equitativo de las tierras restantes, unas 200.000 hectáreas.
Se acusa a la comunidad criolla de promover el consumo y venta de drogas en la zona.Los originarios exigen justicia por las denuncias presentadas ante la policía.
En respuesta a la gravedad del problema, el ministro Sergio Camacho anunció la distribución de cinco nuevos móviles policiales para la localidad a partir del próximo año, junto con un refuerzo de personal policial.
El ministro de Seguridad y Justicia, Marcelo Ramón Domínguez, también ha ordenado la incorporación de una motocicleta al parque automotor policial local y el despliegue de efectivos de Unidades Especiales para labores de prevención.