La inseguridad vial se intensifica en la ruta provincial que conecta San Lorenzo con la capital salteña, debido a la proliferación de motociclistas que invaden la bicisenda para acortar distancias, poniendo en peligro la integridad física de ciclistas y peatones.

Esta práctica, catalogada como mala costumbre por los vecinos, se ha convertido en un problema recurrente que genera temor e indignación entre los usuarios del espacio.

Ya no podemos salir a correr tranquilos, denunció una vecina afectada.Los motociclistas pasan a toda velocidad y no respetan las señales.

Tenemos miedo de que nos pueda pasar algo. Las imágenes captadas por testigos muestran la imprudencia de estos conductores, quienes circulan a altas velocidades como si estuvieran realizando picadas, sin importar el riesgo para los demás usuarios del espacio.

Esta situación se agrava por el aumento en la cantidad de motos que utilizan la bicisenda, un fenómeno atribuido por los vecinos al inicio de las obras de repavimentación en la ruta provincial.

El peligro no solo afecta a los ciclistas y peatones.Los motociclistas que, al finalizar la bicisenda, deben reincorporarse a la calzada, obligan a los conductores a frenar bruscamente para evitar accidentes, generando una cadena de situaciones peligrosas.

Esta invasión de las bicisendas no solo pone en riesgo la seguridad de las personas, señala un experto en seguridad vial, también genera caos en el tránsito vehicular.

La comunidad exige medidas contundentes por parte de las autoridades para garantizar el orden y la seguridad en este espacio público.

Entre los pedidos se encuentran el refuerzo de los controles viales, la implementación de medidas disuasorias como cámaras de vigilancia y la concientización a la población sobre el uso correcto de las bicisendas.

La falta de control y respeto por la normativa vial pone en evidencia la necesidad de una mayor inversión en seguridad vial y educación ciudadana para evitar tragedias que puedan afectar la vida de los habitantes de San Lorenzo.