El economista Gustavo Reyes ofreció una análisis profundo del panorama económico argentino durante una conferencia realizada en Limache, abarcando temas cruciales como el ajuste fiscal, la inflación, la devaluación y las proyecciones para los próximos meses.

Su ponencia, parte del ciclo Hablemos de lo que viene: Semana de la Industria, brindó una perspectiva valiosa sobre el camino hacia la recuperación económica.

Reyes destacó que el ajuste fiscal implementado en Argentina ha sido fundamental para estabilizar la economía.

El gasto público, que alcanzó un máximo histórico del 47% del PIB, se ha reducido significativamente, proyectándose un cierre de 2024 con un nivel cercano al 32%.

El objetivo del Pacto de Mayo o Julio -dijo Reyes entre risas- era llegar al 25% de 44 que estábamos el año pasado, lo cual refleja el compromiso del gobierno con la corrección fiscal.

Si bien el ajuste ha sido necesario, Reyes reconoció que sus efectos pueden ser difíciles para la población.

Enfatizó que son medidas indispensables para lograr un escenario económico sostenible a largo plazo.

En cuanto a la inflación, Reyes señaló una tendencia positiva en los últimos meses con una desaceleración significativa del promedio mensual, pasando del 8% al 3,4%.

Es muy raro encontrar a 15 economistas que digan que volvemos al 25%, remarcó Reyes.Aunque se advierte sobre la persistencia de factores como el impacto de los salarios y tarifas que siguen creciendo por encima de la inflación, la disminución en la tasa de precios es un indicador positivo.

La devaluación del peso argentino también ha generado incertidumbre.Sin embargo, el mercado ajustó sus expectativas para diciembre, pasando de un dólar esperado de 1900 a uno de 1083.

Si bien este valor supera las proyecciones del Banco Central, el ajuste es menos drástico que lo anticipado inicialmente.

Reyes explicó que la economía argentina no está aislada del contexto global.Factores como las tasas de interés en Estados Unidos, los precios de las commodities y el riesgo país influyen directamente en el crecimiento económico local.

Un escenario con tasas globales más bajas y una mejoría en los precios de las exportaciones podría aliviar las presiones sobre la economía argentina.

En cuanto a la recuperación económica, Reyes proyectó un crecimiento gradual para Argentina.Se espera que la actividad económica se recupere de forma moderada durante el resto del 2024.

Aunque no se anticipa un repunte abrupto, podría haber una mejora en el empleo y el crédito.Sin embargo, el panorama social sigue siendo complejo, especialmente para quienes han perdido sus empleos.

El éxito económico de Argentina dependerá de la correcta gestión de la política monetaria y fiscal, así como de las condiciones externas.

Reyes enfatizó la necesidad de reformas estructurales en áreas como laboral, impositivo y jubilatorio para fortalecer la competitividad del país.