Vandalismo deja sin agua a miles de salteños

Miles de habitantes de varios barrios de Salta se encuentran enfrentando una grave crisis hídrica debido a un alarmante incremento del vandalismo contra la infraestructura municipal de abastecimiento de agua potable.

El incidente, que comenzó el día anterior con el sabotaje del pozo principal que suministra agua a las 240 viviendas del barrio Atocha, ha escalado en gravedad durante las últimas horas.

La madrugada actual trajo consigo la afectación de dos pozos más, ubicados en los barrios Nueva Esperanza 1 y Pueblo Nuevo, donde se registró además el robo de cables esenciales para el funcionamiento de los equipos.

Aguas del Norte, empresa encargada del servicio, estima que el suministro estará interrumpido o con baja presión hasta las primeras horas del viernes.

Los barrios afectados por esta crisis son Loteo Pueblo, 240 Viviendas IPV La Lonja, San Rafael, Atocha I, II y III, Nueva Esperanza y Techo Digno.

Ante la gravedad de la situación, se ha implementado un plan emergente para mitigar el impacto del corte en el suministro.

Camiones cisterna con agua potable estarán disponibles para los residentes afectados quienes podrán solicitar el servicio a través de los números telefónicos 080088882482 y 387 5838387.

La situación es preocupante, no solo por la afectación al suministro de agua que es un derecho fundamental, sino también por la violencia e irresponsabilidad que demuestra este tipo de actos, expresó un portavoz de Aguas del Norte, quien solicitó a la comunidad colaborar con la empresa para identificar a los responsables y evitar futuras interrupciones.

Este incidente ha generado una fuerte repercusión en la opinión pública, con numerosos ciudadanos expresando su indignación a través de las redes sociales.

Expertos señalan que el vandalismo contra infraestructuras esenciales como las plantas potabilizadoras y los pozos es un problema creciente que afecta la seguridad hídrica de las ciudades.

Este tipo de acciones no solo afectan a la población, sino que también generan pérdidas económicas significativas para la comunidad, señaló un especialista en seguridad pública, quien instó a las autoridades a tomar medidas contundentes para combatir este delito.