El Colegio de Odontólogos de Salta denunció un grave caso de intrusismo profesional en Tartagal, donde un individuo sin formación odontológica atendió a numerosos pacientes e incluso realizó procedimientos quirúrgicos.

Guillermo Ocaranza, presidente del Colegio, reveló que el impostor también emitió recetas y certificados médicos, agravando aún más la gravedad de la situación.

Este caso refleja una problemática creciente en nuestra provincia, señaló Ocaranza, quien enfatizó que las personas no calificadas suelen ofrecer servicios a precios más bajos, lo que atrae a pacientes vulnerables y pone en peligro su salud.

Lo barato puede salir caro, advirtió el presidente del Colegio, haciendo hincapié en los riesgos asociados a recibir tratamientos de manos inexpertas.

La falta de formación adecuada puede conllevar errores médicos graves con consecuencias irreversibles para la salud bucal de los pacientes.

Desde complicaciones post-operatorias hasta infecciones y daños permanentes en los dientes y encías, las prácticas irregulares pueden tener un impacto devastador en la vida de las personas.

Ante este panorama preocupante, el Colegio de Odontólogos de Salta se prepara para lanzar una campaña de concientización para alertar a la comunidad sobre los peligros del intrusismo profesional.

La iniciativa busca informar a la población sobre la importancia de acudir a profesionales acreditados y denunciar cualquier práctica ilegal.

El Colegio también ha tomado medidas legales para investigar este caso específico y poner fin al ejercicio ilegal de la profesión.

Se espera que esta acción sirva como un recordatorio contundente sobre la necesidad de proteger la salud pública mediante el control y la regulación del ejercicio profesional.