El ministro de justicia de la Nación, Mariano Cúneo Libarona, protagonizó una sesión polémica durante su comparecencia ante la Comisión de Mujeres de la Cámara de Diputados.

Durante más de tres horas, el funcionario desplegó una serie de críticas contundentes contra las políticas de género implementadas en los últimos años, llegando a solicitar su desmantelamiento.

Cúneo Libarona calificó las políticas de género como hipocresia, cinismo y un garrote ideológico destinado a captar sectores de la clase media.

Acusó al organismo de ser una gran estafa con despilfarros, donde los programas eran inútiles y las víctimas no recibían el apoyo adecuado.

El ministro fundamentó su postura argumentando que la prioridad del Estado debería centrarse en problemas como la pobreza, la falta de acceso a servicios básicos y el abandono de los adultos mayores.

Recibimos un país con una economía devastada, con millones de niños en la pobreza y con señores mayores abandonados, manifestó Cúneo Libarona, destacando que estos son los verdaderos desafíos para Argentina.

Su discurso incluyó además una fuerte crítica a la diversidad de identidades sexuales.Rechazamos la diversidad de identidad sexual.

Son inventos subjetivos, afirmó el ministro, quien también cuestionó las políticas de igualdad de género argumentando que el libertarismo ya establece la igualdad entre los sexos.

Las declaraciones del ministro provocaron una inmediata reacción de rechazo por parte de las diputadas presentes en la comisión.

Gabriela Estévez (Unión por la Patria) calificó su exposición como un panfleto libertario, cargado de ideología de odio que tuvo poco que ver con las funciones importantes que tiene a su cargo.

Maximiliano Ferraro (CC) lo acusó de desconocer los avances legislativos en materia de derechos humanos alcanzados en las últimas dos décadas.

No puede desconocer que ser gay, lesbiana, travesti o transexual estuvo siempre asociado a la ignominia y a la discriminación, señaló Ferraro, criticando la postura del ministro.

Las palabras de Cúneo Libarona se producen en un contexto donde la violencia contra las mujeres sigue siendo una problemática grave.

El último informe del Observatorio Ahora que sí nos ven registró 78 femicidios en los primeros cuatro meses del año, lo que implica un femicidio cada 37 horas.