Una jornada sobre el panorama actual de la violencia sexual contra niños, niñas y adolescentes en el país, organizada por Equality Now y FUSA, expuso las profundas heridas que este delito inflige a las víctimas y su entorno familiar.
Especialistas en derechos humanos, salud y justicia se congregaron para abordar una problemática alarmante: el abuso sexual infantil en Argentina, identificando los desafíos y retrocesos en la lucha por los derechos de las infancias y las mujeres.
Daniela Dosso, Madre Protectora de sus dos hijos y cocreadora de la campaña alerta_pormartin, que busca visibilizar el encubrimiento judicial del abuso sexual paterno filial, compartió su visión tras la jornada: Lo primero que nos quedó muy claro a todas es que el abuso sexual contra niños, niñas y adolescentes es un problema de salud pública.
Dosso enfatizó la gravedad y frecuencia de estos casos, que se dan principalmente en el entorno familiar, con padres, padrastros, tíos y abuelos como principales agresores.
La lucha de las Madres Protectoras se configura como una contienda desigual, enfrentando el contexto de retroceso de derechos y las políticas públicas que afectan a la perspectiva de género dentro del sistema judicial, como lo expresó recientemente el Ministro Mariano Cúneo Libarona en sus polémicas declaraciones.
Impunidad y falta de acceso a la justicia:
Dosso denunció: Es un problema de volumen, de gravedad, y también de derechos humanos porque hoy en Argentina existen muchísimos obstáculos para el acceso a la justicia.
A pesar de que presentar denuncias es relativamente fácil, obtener justicia efectiva resulta extremadamente difícil.
Se observa una falta de condena por este tipo de delitos, lo que perpetúa la impunidad debido a la falta de testigos y la complejidad de los casos.
El rol del sistema de salud:
Dosso subrayó: La búsqueda de la verdad no empieza en la justicia, sino en el sistema de salud.
La falta de diagnóstico, registro y certificación del abuso en el sistema de salud obstaculiza el acceso a la justicia.
Se necesita un modelo basado en la detección, derivación a equipos especializados con accesibilidad, y un sistema de registro en lenguaje clínicoforense para que lo actuado en salud favorezca el acceso de los pacientes a la justicia.
Teorías pseudocientíficas como obstáculo:
El uso del Síndrome de Alienación Parental (SAP), una teoría desacreditada utilizada por abogados defensores para evitar condenas, se presentó como otro problema durante la jornada.
Dosso denunció el backlash contra las madres protectoras y los profesionales que asisten a las víctimas, generando un desincentivo en muchos especialistas en salud mental.
Posibles consecuencias de la falta de intervención:
Dosso advirtió que la falta de intervención temprana puede derivar en graves consecuencias para las víctimas durante la adolescencia, como intentos de suicidio, depresiones y adicciones.
La jornada también destacó la importancia de la organización en redes y el fortalecimiento de las prácticas de protección.
Dosso recordó su experiencia personal como madre protectora: Nosotras ya vivíamos años anteriores toda la avanzada de antiderechos, haciendo referencia a los obstáculos que enfrentan las madres que intentan proteger a sus hijos.
Es urgente abordar esta problemática con mayor compromiso, fortaleciendo los sistemas de justicia y salud para garantizar la protección integral de niños, niñas y adolescentes frente a la violencia sexual.