
La obra de León Ferrari retumbó en los museos de Rosario
Día Internacional de los Museos. Foto: Sebastián Granata. En el marco del Día Internacional de los Museos, la ciudad de Rosario impulsó la iniciativa 'Resuena Ferrari' , un recorrido por las obras sonoras creadas por el reconocido artista León Ferrari durante su exilio en San Pablo a partir de 1976 , a través de las colecciones estables de sus diferentes museos, que se resignificaban con actividades libres en torno a estas creaciones en las que experimentaba con nuevos medios y materiales.
Durante su exilio en Brasil, luego de la desaparición de su hijo Ariel a manos del régimen militar argentino, Ferrari (1920-2013) produjo una serie de obras que denominó 'arte lúdico', que dieron origen a 'esculturas sonoras' que se podía ver y jugar en un circuito por todos los museos municipales de Rosario.
A 40 años del regreso a la democracia, los organizadores de 'Resuena Ferrari' propusieron 'realizar diálogos que interpelen a la comunidad' para 're-imaginar' una democracia que 'enamora y emociona', a través del trabajo de Ferrari que continúa en permanente diálogo con la realidad y las producciones actuales.
A 40 años del retorno a la democracia, los organizadores propusieron 'realizar diálogos que interpelen a la comunidad' para 'reimaginar' una democracia que 'enamora y emociona'El recorrido propuesto comenzó el jueves a las 9 en el Museo de la Memoria (Córdoba 2019), donde el público pudo conocer e interactuar con la escultura 'Berimbau', realizada con cien barras verticales de acero de diferentes diámetros que, al ser movidas por los visitantes se transforman en un instrumento musical con múltiples timbres sonoros.
La escultura cobró más vitalidad durante una actividad en la que alumnos de diferentes escuelas primarias de la ciudad se acercaron a la obra de Ferrari a través de una intervención teatral y musical que culminó con una estruendosa interacción con el monumental instrumento que llamó la atención. de los circunstanciales transeúntes de la céntrica calle Córdoba.
La siguiente parada del itinerario llevó al visitante al Museo de la Ciudad (Oroño 2300) que albergaba otro de los dispositivos sonoros proyectados por el reconocido artista titulado 'Gong', conformado por una estructura de madera que soporta una plancha de acero industrial que se ejecuta a través de siete varillas de acero terminadas en bolas de goma ancladas a la base, que formó parte de la exposición 'Otras Músicas' de León Ferrari en 2021.
'Gong' logró una interacción intuitiva y fluida con el público, quien rápidamente comenzó a tirar de las barras de acero y soltarlas bruscamente para provocar azotes contra la chapa, produciendo un sonido similar al que hace el instrumento oriental del mismo nombre.
La pieza adquirió un nuevo significado al ser puesta en diálogo con la exposición 'Historias de Metal: del taller a la ciudad (1939-1962)', 'que aborda cómo el desarrollo industrial en Argentina fue desmantelado por un modelo económico neoliberal que atacó también contra la lucha social', señaló la historiadora del Museo, Noelia Cuéllar.
'En la época en que se logró el florecimiento industrial, los trabajadores fueron los principales actores en la reivindicación de sus derechos, sabemos que el plan sistemático de la última dictadura era desmantelar toda esa lucha y León Ferrari también lo sufrió en carne propia' , comentó.
Foto: Sebastián Granata. Una obra de Ferrari nunca deja indiferente al observador y como uno de los principales referentes de la corriente estético-política, el artista buscó impactar y siempre lo consiguió, incluso en sus cuadros más abstractos como el expuesto en el Castagnino. Museo (Oroño y Pellegrini), en la tercera instancia del circuito.
Se trata de escribir con pintura acrílica sobre tela, 'Sin título', 2007 , donada por el propio artista a la colección permanente del Museo, que se 'activaba' a las 15:00 horas con visitas guiadas y talleres de dibujo.
Sobre un lienzo blanco, aparece una vorágine de grafismos de líneas negras en relieve que configuran un acromatismo que es interrumpido por letras concatenadas en cursiva y a mano alzada de un rojo intenso que recortan un rectángulo en el centro, 'como si la figura central fuera un libro escrito con sangre', dijo uno de los visitantes durante la visita guiada.
La observación es pertinente para un artista cuyas imágenes buscaron cuestionar las sagradas escrituras de la Iglesia Católica, así como el terrorismo de Estado, la guerra, el hambre y la corrupción a través de la exploración del lenguaje.
Esta obra dialoga con las exposiciones ubicadas en el piso superior del Castagnino 'Crónicas abstractas', que también aborda la abstracción del lenguaje a través de las obras de las artistas locales Celeste Carnovali, Marcela Duluc, Rosario Farias, Luciana Guerra y Juana Torres.
Foto: Sebastián Granata. Creada el mismo año en que Ferrari recibió el León de Oro al mejor artista en la 52 Bienal Internacional de Arte de Venecia, corresponde a la serie de escritos donde lo poético y lo político se relacionan con una corrosiva crítica a la Iglesia. , que se relaciona con todo su trabajo dedicado a levantar banderas a favor de los Derechos Humanos y contra la violencia de Estado', explicó la representante del área educativa del Museo, Juliana Tomattis.
En esa línea, Florencia Cardú, integrante de la misma área, señaló: 'Como todo trabajo contemporáneo hay una polisemia que trabajamos con el público en visitas de gira y precisamente esa cualidad hace que nos invitemos constantemente a realizar un acto reflexivo. que luego resuena y perdura en el tiempo.
'Es muy acertado usar la palabra resonar al referirse al trabajo de Ferrari, es algo que queda en el aire, que da vueltas en la cabeza y no cierra sino que genera interrogantes y reflexiones', agregó.
La universalidad y sensibilidad de la obra expuesta permitió a los organizadores del Castagnino utilizarla para desarrollar un taller de dibujo con niños de 3 y 4 años, donde la contemplación de las líneas de la gráfica Ferrari fue la excusa para que los más pequeños expresaran ellos mismos. sobre papel con crayones, fibrones, lápices y acuarelas.
Sobre pupitres modulares a nivel del suelo, los alrededor de 40 pequeños alumnos de la Escuela Primaria Brigadier Estanislao López realizaron líneas onduladas y coloridas imitando los elementos compositivos y la expresión plástica del cuadro.
Foto: Sebastián Granata. El circuito retomó las investigaciones gráficas de la obra contemporánea de Ferrari con escritura sobre papel y vidrio, 'Bienaventurados malditos' (1998) ubicado en el cuarto piso del Museo de Arte Contemporáneo (Macro) (Oroño y el río) donde los visitantes realizaron un recorrido en compañía de curadores y especialistas.
Ubicado sobre la costanera rosarina y a pocos metros del Monumento Nacional a la Bandera, el Centro de Estudios Latinoamericanos Ernesto Che Guevara (Av. Belgrano 950) abrió un recorrido por su exposición permanente que repasará parte de la trayectoria del artista en tensión con la figura del revolucionario rosarino, que fue el centro de su obra 'Unwelcome Rockefeller to the land of Guevara' en 1969.
Además, por primera vez, fue posible interactuar con la pieza inédita 'Jinglebells', que forma parte de sus esculturas sonoras generadas en el exilio paulista.
El circuito finalizó a las 20:00 horas en el Museo Estévez (San Lorenzo 753) con el conversatorio 'Resonancias. Posibles derivas en torno a la sustentabilidad política', que reunió a la Logia del Museo Sebastián Stra, Silvana Schulze y la nieta del artista, Julieta Zamorano. Ferrari para debatir sobre la sustentabilidad política de los espacios culturales basados en el arte, la creación y el vínculo con la comunidad.