
'Es una obra sobre una verdad clara y descarnada del papel materno'
Foto: Facundo Suárez. La actriz y cantante Inés Estévez se luce en su papel protagónico en 'Bosque adentro', una emotiva pieza que retrata con profundidad las complejidades del vínculo de una madre con su hija adolescente durante un viaje por el sur argentino, todos los martes a las 20:00 horas en el Centro Cultural 25 de Mayo de Buenos Aires.
'La idea de encarnar una maternidad neurotípica me permite atravesar algo que en mi vida personal es imposible', reveló Estévez en charla con Télam, en alusión a las diferencias entre la composición de su personaje para la obra y su experiencia de vida. , ya sea desde el escenario, como madre de dos niñas con discapacidad.
La trama de la pieza se desarrolla cuando una madre se embarca con su hija de 17 años en un viaje en motorhome a Bariloche y durante el trayecto se suceden discusiones, confesiones, momentos de ternura y también denuncias, que transforman el viaje en un Montaña rusa. de emociones
'El hecho de que sea una 'road movie' teatral ya es un reto que requiere un lenguaje arriesgado. Es una obra sin artificios ni grandes giros, un revelador viaje en la vida de dos personas'Este recorrido, atravesado por un vaivén de sentimientos, preguntas adolescentes e incluso menciones a la crisis ambiental, no hará nada igual para ambos al final del viaje.
'Es una historia atractiva y consistente en cuanto a la relación madre-hija, los temas que toca son de gran actualidad y, además, la obra tiene cierta ruptura con los temas teatrales habituales', destacó la actriz .
'El hecho de que sea una 'road movie' teatral ya es un reto que requiere un lenguaje arriesgado. Es una obra sin artificios ni grandes giros, un revelador viaje en la vida de dos personas', abundó la intérprete, quien en el In En los últimos años, también se ha labrado su propio camino en la escena del jazz local.
Dirigida por Corina Fiorillo y música en directo de Tomás Pol, la pieza ofrece grandes interpretaciones de Inés Estévez y Ornella D'Elía ('Los sonámbulos', de Paula Hernández) y un texto profundo y sensible de Carla Moure.
Foto: Facundo Suárez. -¿Qué le sedujo de la propuesta de 'Bosque adentro'? - Ya había estado a punto de trabajar con Corina Fiorillo y no se había dado; Me gustó su viaje y en cuanto la conocí sentí que me iba a resultar enriquecedor. El texto de Carla Moure fue íntimo y conmovedor, ofreció un lenguaje sencillo pero profundo y que no es fácil de conseguir en el teatro comercial; y el hecho de que el elenco se completara con Ornella D'Elía solo me hizo decidir, es una persona talentosa y hermosa.
-¿Qué destacas de tu carácter? -Más allá del rol de madre, que es el más categorizable, hay una mujer que ha crecido sola y aislada con un progenitor problemático que le ha dejado marcas traumáticas, ha tenido una hija cuando era muy pequeña y ha llevado a cabo su crianza sin pareja. El arco del personaje es un cúmulo de revelaciones en un viaje de mil kilómetros, una complejidad muy interesante para navegar como actriz.
-¿Cómo define el vínculo entre esa madre y su hija? -Es un vínculo entrañable que pasa por un punto de inflexión en el que todo se transformará para siempre.
-En la obra se retrata la maternidad sin romantizarla. -Si, absolutamente. Ilustra una verdad clara y cruda en relación con el papel materno. El enfoque es profundo pero no endulzado.
¿Hay una reflexión sobre esta propuesta? -Yo dejaría la reflexión al espectador. Creo que cada uno desde su punto de vista, sea hija, madre o padre, puede sentir cosas muy diferentes. En cualquier caso, las conclusiones coinciden, como la importancia de la responsabilidad en la crianza, hasta qué punto los desajustes personales pueden afectar a un niño, cómo varían las opiniones de generación en generación, cómo varían las predisposiciones relacionales según la experiencia, cuán inexorablemente los niños vuelan tarde o temprano y cómo se repiten las historias en cada generación.
Foto: Facundo Suárez. -En la historia se cuestiona la figura del hombre y la paternidad. -Si totalmente. Los hombres en la obra son omnipresentes. Se habla de ellas, son centrales en la vida de estas mujeres, sin embargo son figuras cuestionadas en algunos puntos, justificadas en otros y, de alguna manera, ausentes.
-También eres uno de los protagonistas de 'Plagio', la nueva apuesta teatral de José María Muscari, ¿qué propone la pieza? 'Plagiarism' es la espectacularidad de Muscari al servicio de un texto dramático e intenso, al que por supuesto no le falta la agilidad ni el humor que caracterizan a José. Es una misma obra protagonizada por cuatro parejas diferentes y la gente puede elegir qué dúo ver. En mi caso, Malena Solda tiene que encarnar a la pareja femenina, y la propuesta tiene un trasfondo que sorprenderá. En definitiva, habla del amor, pero atravesado por el poder, la pasión, ciertos miedos y la perspectiva de éxito de uno de sus integrantes, lo que desencadena el conflicto.
-¿Cuál es tu papel en la obra? -Mi personaje es un político a punto de asumir el poder como presidente. Con un conflicto que pone en juego su fachada de mujer casada y la relación con su amante, que siendo mujer complica aún más el panorama.
-A nivel personal, ya raíz de las experiencias con sus hijas, se involucró activamente con el proyecto de ley de Formación de Profesores en Discapacidad. Usted se presentó y habló en el Senado el pasado mes de abril, ¿qué opina de la Ley?-En principio, quien impulsó esta Ley es Romina Núñez, abogada especializada en discapacidad y madre de un niño neurodiverso. Creemos que saldrá porque se está haciendo tanto en el Senado como en Diputados. Es un punto de partida para futuras mejoras en relación a la falta de herramientas que tiene la escuela común en materia de discapacidad. Pueden entrar al canal de YouTube del Congreso y escuchar a todos, la presentación de Ian, un niño con autismo que describe su camino escolar con tremenda claridad, es definitiva. Luego habrá que perfilar la postulación con mimo y respeto por cada una de las partes, y espero que esto convenza a los involucrados y que no se tomen decisiones de escritorio que no respondan a las necesidades auténticas de los participantes.