Cuenta lograda de un pionero danés en Formosa
¿Qué pasión serena y ferviente impulsa al hombre a explorar lo desconocido, contra toda comodidad y, a veces, contra su propia seguridad? En 1920, el teniente Gustaf Emil Haeger salió de su casa en Estocolmo para adentrarse en la densa montaña de Formosa hasta encontrar a los salvajes que imaginó en su infancia. Erland Nordenskiold (primo del explorador antártico rescatado por la corbeta 'Uruguay') y el impagable Aarón Anchorena, un dandy que, entre otras cosas, se hizo amigo del temible cacique Garcete, tal vez siguiendo el ejemplo de otro dandy, el coronel Lucio V. Mansilla, amigo del cacique ranquel Mariano Rosas.