En un giro inesperado, el equipo del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha firmado un memorando de entendimiento con el Departamento de Justicia que permitirá al Buró Federal de Investigaciones (FBI) verificar los antecedentes de algunos miembros designados para su gabinete.
Esta decisión pone fin a la resistencia inicial de la transición de Trump hacia el uso del FBI para estas verificaciones, prefiriendo en su lugar procesos de evaluación por medio de empresas privadas.
La desconfianza expresada hacia la agencia federal se había convertido en un punto de controversia y preocupación dentro del ámbito político.
El acuerdo con el Departamento de Justicia garantizará que el presidente Trump y su equipo estén listos desde el primer día para comenzar a implementar la agenda Estados Unidos primero, que fue respaldada de forma abrumadora por nuestra nación el día de las elecciones, declaró Susie Wiles, futura jefa de gabinete de Trump.
El memorando se produce tras una creciente presión ejercida por senadores republicanos quienes expresaron su inquietud ante la posibilidad de retrasos en el proceso de confirmación de los nominados al gobierno por parte del Senado debido a la falta de verificaciones de antecedentes.
La obtención de autorizaciones de seguridad gubernamentales es crucial para que los miembros del equipo de transición puedan acceder a información confidencial mientras se preparan para asumir sus roles en enero.
Este acuerdo busca asegurar un proceso fluido y oportuno en la toma de posesión del nuevo gobierno.