El emprendimiento femenino está ganando terreno en España, pero todavía queda mucho camino por recorrer para lograr la igualdad real en este sector.
A pesar de los avances notables, el panorama actual revela una realidad compleja donde las mujeres siguen enfrentando desafíos significativos.
Un reciente estudio del Mapa del Emprendimiento 2024, realizado por South Summit en colaboración con IE University, muestra que el porcentaje de mujeres fundadoras de startups sigue estancado en el 20% desde hace más de una década.
Aunque los equipos liderados exclusivamente por mujeres han experimentado un crecimiento positivo, pasando del 6% al 10%, la cifra aún se encuentra muy lejos de reflejar el potencial femenino en este campo.
El informe también destaca otro dato preocupante: el 18% de las mujeres fundadoras no ocupan ningún cargo directivo en sus propias startups, mientras que esta cifra es del 11% en el caso de los hombres.
Estas estadísticas no son solo datos fríos; representan barreras culturales y estructurales que continúan limitando la participación femenina en el mundo del emprendimiento tecnológico.
Históricamente, la brecha de género en campos STEM ha contribuido a esta percepción, afirma Viviana Millán, fundadora de Alter Ego Solutions, empresa especializada en asistentes personales virtuales.
Mercedes Broseta, cofundadora de VisualNACert, una plataforma que mejora la gestión de información para el sector agrícola, ve un cambio positivo: Cada vez más mujeres están liderando startups tecnológicas y ocupando puestos de liderazgo en el sector.
Iniciativas como los Women Startup Awards están dando visibilidad a estos logros.
Efectivamente, iniciativas como los Women Startup Awards han logrado colocar a las mujeres emprendedoras en el centro del escenario, reconociendo sus éxitos y contribuciones al ecosistema tecnológico.
Pero la lucha por la igualdad no ha terminado.
Nera González, embajadora de Technovation Girls Madrid, un programa que promueve el emprendimiento femenino en tecnología, subraya la importancia de empoderar a las niñas desde temprana edad: La brecha de género en STEM tiene un impacto directo en el emprendimiento tecnológico, ya que la menor participación de las mujeres en este campo reduce su presencia en la creación de startups.
Los estereotipos sobre qué carreras son para hombres o para mujeres han limitado históricamente el interés y las oportunidades de muchas niñas y jóvenes en tecnología.
Los programas como Technovation Girls buscan romper estos ciclos y fomentar un ecosistema más inclusivo donde las mujeres puedan desarrollar su potencial al máximo.
La motivación para emprender también se diferencia entre hombres y mujeres.Mientras que el 48% de los hombres lo hacen por un sueño de toda la vida, el 42% de las mujeres señala haber detectado una oportunidad en el mercado.
Este dato refleja un enfoque más pragmático y basado en la resolución de problemas reales, características que suelen asociarse a las mujeres.
Marta Guardiola, cofundadora y CTO de MiWEndo Solutions, explica que su motivación para emprender fue precisamente la necesidad de llevar a cabo una investigación médica hasta su aplicación práctica: Decidí emprender tras más de diez años trabajando como investigadora en la Universidad.
Durante esta etapa de investigación, me di cuenta de que, desde la Universidad, era prácticamente imposible completar el camino hacia la creación de un dispositivo médico que pudiera llegar a los pacientes.
Viviana Millán también se vio impulsada por una necesidad social al identificar la falta de tiempo y la posibilidad de delegar tareas cotidianas.
La tecnología ha sido un pilar esencial para el desarrollo y la expansión de Gravity Wave, afirma Amaia Rodríguez, fundadora de Gravity Wave, empresa que utiliza plástico reciclado para crear productos innovadores.
A pesar de los avances, las mujeres en puestos de liderazgo enfrentan desafíos adicionales como la falta de espacio, la sorpresa por su presencia en roles directivos y la presión extra para demostrar sus capacidades.
Es muy gratificante liderar un proyecto tecnológico, reconoce Amaia Rodríguez.Pero el mayor reto ha sido la constante necesidad de demostrar mi capacidad y liderazgo en un campo que históricamente ha sido visto como dominado por hombres.
El camino hacia una igualdad real en el emprendimiento femenino es largo, pero las voces de estas mujeres inspiradoras nos muestran que es posible romper barreras y construir un futuro más justo e inclusivo.
Confíen en sus habilidades, les dice Eva García, CEO y cofundadora de WIVI Vision, a las jóvenes profesionales que aspiran a liderar proyectos tecnológicos.
Sé auténticas, fieles a tus valores.En este sector es importante no tener miedo al fracaso porque de cualquier aprendizaje puede surgir una oportunidad.