Francia Impulsa la Energía del Futuro: Proyecto Maremotriz NH1 Recibe Financiación Europea Clave
Normandía Hydroliennes ha anunciado un hito significativo para el sector energético francés: su proyecto maremotriz NH1 ha sido seleccionado como ganador del Fondo de Innovación 2023 de la Unión Europea, recibiendo una inyección financiera de 31,3 millones de euros.
Esta distinción consolida a Francia como pionera en la explotación de las corrientes marinas para generar energía renovable y refuerza su compromiso con la transición hacia un modelo energético más sostenible.
El proyecto NH1 representa uno de los primeros parques piloto de energía maremotriz a escala comercial en Francia, una nación que cuenta con el segundo mayor potencial de este tipo de energía en Europa, estimado entre 5 y 6 GW, capaz de abastecer a aproximadamente 8 millones de personas.
La iniciativa se centra en la instalación de cuatro turbinas de eje horizontal AR3000, consideradas las más potentes y eficientes del mundo para su uso comercial, que estarán construidas en Cherburgo.
Se estima que estas turbinas generarán anualmente 34 GWh de energía limpia y predecible, suficiente para abastecer a cerca de 15.000 hogares a partir de 2028.
Ser seleccionados por el Fondo de Innovación es un reconocimiento invaluable de nuestro trabajo y del impacto transformador que nuestra tecnología puede tener en la descarbonización y la combinación energética, declaró Katia Gautier, directora de Normandie Hydroliennes.
Este apoyo nos permitirá acelerar significativamente el desarrollo e implementación de este proyecto crucial.
El Fondo de Innovación 2023, dotado con un presupuesto total de 4.800 millones de euros por parte de la Comisión Europea, tiene como objetivo impulsar tecnologías innovadoras y bajas en carbono.
Los proyectos seleccionados fueron evaluados rigurosamente según criterios que incluyen el potencial de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), grado de innovación, preparación tecnológica, financiera y operativa, replicabilidad y viabilidad económica.
Este proyecto no solo representa un avance tecnológico importante, sino también una oportunidad para fortalecer la economía azul francesa, explicó Jean-Pierre Dubois, analista del sector energético.
La creación de alrededor de 400 empleos directos e indirectos, con el objetivo de que el 80% del valor de construcción provenga de Francia, es un testimonio del compromiso con la soberanía energética y la reindustrialización.
El éxito del proyecto NH1 se alinea con los objetivos de energía renovable de Francia para 2030 y su estrategia gubernamental de inversión en innovación.
Este hito subraya el creciente reconocimiento global de la energía maremotriz como una fuente crucial para diversificar las fuentes energéticas y mitigar el cambio climático.
La tecnología mareomotriz, junto con otras energías renovables como la eólica, solar e hidroeléctrica, se presenta como una alternativa vital a los combustibles fósiles, contribuyendo a reducir significativamente las emisiones de GEI y avanzar hacia un futuro energético más limpio y sostenible.
